La Cámara Federal porteña ratificó que consumir estupefacientes en un espacio público, aún
cuando por su escasa cantidad no deje dudas de que se trata de “uso personal”
constituye un delito porque potencialmente podría afectar a la “salud pública”.
La Sala Segunda de la Cámara, por mayoría integrada por los jueces Horacio Cattani y Martín
Irurzun, ratificó el procesamiento dictado en primera instancia por el juez Julián Ercolini contra
una persona sorprendida por la policía fumando marihuana en una pipa artesanal en una plaza
pública. Al hombre se le secuestró, además, una bolsa con una pequeña cantidad del alcaloide.
El tribunal reinterpretó el “Fallo Arriola”, con el que la Corte Suprema
despenalizó parcialmente el consumo personal de estupefacientes en el ámbito de la privacidad.
En ese sentido, diferenciaron que en aquel fallo la conducta analizada no tenía
“trascendencia a terceros", a diferencia de éste, en que el sorprendido fumando marihuana
estaba en un lugar público y de libre acceso para otras personas.
En disidencia, el camarista Eduardo Farah se pronunció por “la declaración de
inconstitucionalidad del tipo cuestionado", es decir la penalización del consumo para casos como el
tratado en el expediente.
Fuente: DyN