La beba que estuvo 12 horas en una morgue tras ser dada por muerta en un hospital de Chaco fue puesta en ayuno debido a una intolerancia a la lactosa que detectaron los médicos y continúa sin cambios en su estado general.
El parte médico dado a conocer por el Área de Neonatología del Hospital Perrando de Resistencia sostuvo que la niña, nacida con una gestación de sólo 26 semanas, se mantiene en ayunas ya que presentó reacciones negativas al alimento provisto por su madre y por el Banco de Leche del centro asistencial.
Luz Milagros continúa con asistencia respiratoria mecánica, aunque bajo parámetros estables, sostuvo el mismo informe.
El martes los médicos decidieron retirar momentáneamente el respirador artificial a la niña, pero luego de tres horas fue reconectada ya que no se encuentra en plenas condiciones de respirar por sus propios medios. La beba sigue compensada hemodinámicamente sin drogas inotrópicas, con tratamiento antibiótico por las infecciones presentadas desde su nacimiento y bajo luminoterapia, mientras desde el punto de vista neurológico no evidencia cambios clínicos.