SOCIEDAD
INTEGRABA UNA BANDA QUE ASALTABA BANCOS

La increíble historia del presidente del Colegio de Abogados de Trelew que admitió haber sido ladrón

Oscar Romero integraba una banda que asaltaba bancos y financieras. Estuvo preso y luego se fugó hasta que su causa prescribió.

El presidente del Colegio de Abogados de Trelew, Oscar Romero
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El presidente del Colegio de Abogados de Trelew, Oscar Romero, confirmó un rumor que circuló fuerte en las últimas horas: una condena a seis años de prisión por robo a mano armada, en un episodio ocurrido en Formosa.

En una entrevista publicada en el diario La Jornada, el letrado sostuvo que " venció al sistema y que su experiencia personal lo capacita para su actual profesión. Resaltó que no se arrepiente de su pasado ya que pagó con años de cárcel y fuga, al admitir que integró una banda delictiva que asaltaba bancos, financieras y personajes de la usura en el norte del país y del Paraguay en una etapa “idealista de su vida”.

Las declaraciones de Romero se produjeron luego que trascendiera en los medios una condena de la Justicia de Formosa de diciembre de 1998, tras un asalto del que participó.

Romero no negó el delito y señaló que estuvo preso en aquella provincia por un año y cuatro meses y tras el rechazo ante un recurso, se fugó hacia el sur del país. Estuvo prófugo el tiempo suficiente hasta que la causa prescribió.

En Trelew, Romero arregló radios, televisores y elementos electrónicos para financiar sus estudios en la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad de la Patagonia, que, a principios del 2000, lo encontró recibido con el mejor promedio hasta hoy jamás superado.

En la entrevista realizada por el diario La Jornada, Romero afirma que: "“Yo no niego mi pasado. Es más, esa experiencia me sirvió para sostener mis convicciones intactas, porque yo las viví.  A mí no me la contaron ni la leí sólo en los libros."

Romero conformó una banda que robaba a mano armada bancos, financieras y casas de usura en el norte del país, Chaco, Corrientes y Misiones. Incluso traspasó las fronteras. Algunos de sus hechos también los ejecutó en Paraguay. “En muchos de ellos jamás fuimos descubiertos”, señaló para añadir que “jamás le robamos a un trabajador”.

Sin embargo, en un suceso en donde ofició de chofer, cayó preso y estuvo en la cárcel un año  y cuatro meses. La Justicia lo encontró culpable de un robo agravado por el uso de arma de fuego, en grado de partícipe primario y fue tras las rejas.

En enero de 1999 se fugó a Trelew donde realizó varios oficios para recibirse luego como abogado. “Cuando me notificaron que habían rechazado mi recurso, me escapé y me vine para el sur. Estuve prófugo varios años hasta que la causa prescribió. De alguna manera demostré que se podía vencer a un sistema perimido y que lo que hice lo pagué y por ello no tengo que rendirle cuentas a nadie, aunque parece que algunas personas creen que sí”.