“¡¿Es un pájaro?!” “¡¿Es un avión?!” No no señores: es Supercake, la primera superheroína lesbiana del mundo de los cómics, cuyas particulares aventuras son desde junio una de las principales atracciones que el magazine online “BAG, llevá la vida que quieras” ofrece entre otras secciones pensadas especialmente para la comunidad gay.
Pero la sensual protagonista de esta tira cómica no parece llamada a convertirse en un verdadero ícono cultural criollo sólo por sus preferencias sexuales. Y es que, lejos de venir del planeta Krypton, Supercake es una heroína bien argenta, creada íntegramente por la primera productora de contenidos gay-friendly de Buenos Aires.
Tal es, al menos, el "título" que se arroga NextDoor, la empresa que Fernanda Mel (ex diseñadora de varias publicaciones de Editorial Perfil) fundó en noviembre de 2007 y que desde ese mismo mes lanza a las calles el mini magazine BAG, una guía gratuita de lugares, productos y servicios gay-friendly que en agosto saldrá por quinta vez.
"El cómic fue lo primero que se me ocurrió", confiesa hoy Mel al conversar con Perfil.com sobre esta creación que comenzó a pergeñar con Juan Martín Grazide hace "unos tres o cuatro años" en forma de un relato con “más o menos 26 capítulos", de los que el primero ya puede leerse completo en la web de BAG y el segundo comenzaría a publicarse esta semana.
Las ilustraciones, en tanto, son hechas por Eleonora Kortarz, quien vive en Salta y se contacta exclusivamente a través de Internet con Mel. "Además de hacer los dibujos, ella reescribe y adapta la historia al formato de un cómic, le agrega cosas", reconoce la fundadora de NextDoor.
Afirmando identidades. Más allá de ser una creación enteramente argentina, la historieta tiene lugar en una Buenos Aires no sólo reconocible a través de su geografía, sino también -y mucho más aún- de los propios personajes. Una primera afirmación de identidad nada casual en un proyecto que, justamente, mucho tiene que ver con la afirmación de identidades.
A su vez, esos aires porteños aportan una buena dosis de humor a una historia que, más que de los viejos y queridos superhéroes tradicionales, pretende reírse de estereotipos bien característicos de la cotidianeidad local, como su propio título lo hace empleando el mote de “tortas” ("cakes" en inglés) que reciben aquí las lesbianas.
Así es también como Marina (la protagonista de la tira) es presentada como “una chica bien que estudió en el Saint Conchets de Belgrano cuya mayor preocupación era decidir a qué shopping ir”, pero que por obra y gracia de su abuela, un collar mágico y su propio lesbianismo en ciernes se convertirá en “la más grande y torta superheroína de todos los tiempos”.
Ese tipo de relaciones con la realidad cotidiana, además de sus muy buenos dibujos y un guión muy dinámico, son la clave del éxito de la tira, que desde que está online hizo que se duplicaran las visitas al sitio de BAG consignadas por la empresa que provee su hosting.
Lo cierto es que, si bien Mel asegura que “por ahora" no la llevará al papel, Supercake parece tener un gran futuro. Por lo pronto, en noviembre ya habrá remeras con su imagen en el stand que NextDoor tendrá en la expo gay “Gallery G” de Costa Salguero. Está claro: un nuevo ícono cultural está naciendo. Y viene a derrumbar muchos muros.
*Redactor de Perfil.com.