El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos elevó a un millón de pesos la recompensa para aquellas personas que aporten datos útiles para ubicar a quienes fueron menores robados por la última dictadura militar, para restituirles la identidad.
La Resolución 409, que aparece hoy en el Boletín Oficial, fue firmada por el ministro Julio Alak. Entre sus argumentos señala que "quienes quieran suministrar datos deberán comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de Personas ordenada por la Justicia, al (011) 5300-4020".
El ministerio que depende de Alak recordó que hasta ahora "se ha logrado la restitución de 110 jóvenes víctimas del delito de sustracción de menores durante el terrorismo de Estado, y aún restan encontrar cerca de otras 400 víctimas".
A partir de la instauración de una recompensa, "en casi un año se recibieron más de 1.900 llamados telefónicos desde todo el país y se han presentado a prestar declaración presencial más de 200 personas interesadas en ingresar al Fondo Permanente de Recompensas, mientras otro número importante de ciudadanos han ofrecido información de manera anónima y desinteresada".
La nueva resolución aumenta de 100 mil a un millón de pesos la recompensa ofrecida, y se mantiene la prohibición de otorgársela a los funcionarios o empleados públicos y el personal que pertenezca o haya pertenecido a alguna de las fuerzas de seguridad u organismos de inteligencia del Estado.
Las personas pueden comunicarse con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de Personas Ordenada por la Justicia (BUSCAR) al (011) 5300-4020 del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.