La militante Adriana Calvo de Laborde, quien fuera dirigente de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos (AEDD) de la última dictadura militar, falleció ayer en la Ciudad de Buenos Aires víctima de un cáncer.
Calvo estuvo detenida a principios de 1977 y salió en libertad en abril de ese año. Desde entonces, participó de las denuncias contra los represores, declaró en la CONADEP y en el juicio contra los comandantes de la Junta Militar.
Profesora de física en la facultad de ingeniería de la Universidad de Buenos Aires, Calvo fue una de las principales fundadoras de la Asociación Gremial Docente (AGD). Néstor Correa, dirigente de AGD, hoy recordó a su compañera como una "enorme persona y valiente".
Calvo había sido raptada por fuerzas militares el 4 de febrero de 1977, cuando militaba en el gremio de los docentes de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Al momento del secuestro, estaba embarazada de seis meses y medio y se encontraba en su casa de la localidad bonaerense de Tolosa. Durante su cautiverio ilegal, pasó por los centros clandestinos de detención que funcionaron en la Brigada de Investigaciones de La Plata, en el Destacamento de Arana y en el llamado Pozo de Banfield.
En el Pozo de Banfield, Calvo debió dar a luz a su hija sobre el mismo camastro en que la torturaban a ella y otros prisioneros, e incluso asistió el parto de Inés Ortega, quien permanece desaparecida. En 1985 fue la primera sobreviviente del terrorismo de Estado que dio su testimonio en el histórico Juicio a las Juntas Militares, de cuya realización se cumplieron 25 años la semana pasada.
Fuente: DyN.