Un suicida en potencia, cables con peligro electrocución que generan humo, medidas gremiales y hasta perros que perdieron el rumbo, cualquier incidente representa un motivo de peso para la suspensión del servicio del subterráneo de Buenos Aires y el consecuente mal humor de los usuarios.
Esta mañana, la línea "A" de subterráneos paralizó esta mañana su servicio entre las terminales de Plaza de Mayo, en el centro porteño y Carabobo en el barrio de Flores, tras permanecer interrumpida alrededor de 40 minutos al quedar varada una formación entre dos estaciones, informó Metrovías a la agencia Télam.
Un vocero de la empresa dijo que "a las 8:06, tras finalizar la evacuación de un tren que quedó varado por problemas técnicos entre las estaciones Plaza Miserere y Pasco, se normalizó el servicio de la línea A de subterráneos".
"En principio los trenes realizan todo el recorrido, aunque aún se producen algunas demoras", agregó. El vocero de Metrovías remarcó que "la evacuación se realizó tal cual lo estipula el protocolo de seguridad en estos casos", que "solo hubo un problema técnico" y que "los pasajeros no sufrieron ningún inconveniente". La formación había quedado detenida a las 7:25.
Un paleta de problemas multicolor para los usuarios durante las últimas semanas. El 28 de agosto pasado, un trabajador despedido por la empresa Metrovías, sospechado de haberse robado 36.000 pesos de una boletería del subte, se tiró a las vías para protestar en la estación Callao y causó que la línea D funcionara con servicio limitado desde Congreso de Tucumán a Pueyrredón. Una semana antes, el mismo trabajador había interrumpido el servicio de la misma manera.
La línea B del subte funcionó la mañana del 26 de agosto con servicio reducido por un "problema técnico" en una cochera de la terminal Juan Manuel de Rosas.
En la mañana del 21 de agosto, día del primer intento "suicida" del trabajador mencionado previamente, fue una mañana caótica en casi todas las líneas. Cerca de las 10 se detectó un principio de incendio en la línea C, a la altura de plaza San Martín. Según un comunicado de Metrovías, "la línea C se interrumpió debido a la detección de presencia de humo en el túnel entre las estaciones San Martín y Lavalle". A la par, la línea B del subte, sentido a Lean N. Alem, funcionó con demoras durante la mañana por un hecho insólito: un perro en las vías.
El 15 de agosto, el servicio de la línea A estuvo interrumpido durante más de tres horas por una protesta realizada por personal "tercerizado" (40 vigiladores despedidos) en la estación Miserere.
Por último, una formación de la línea D de subtes fue evacuada el 12 de agosto, tras quedar detenida "por problemas técnicos" entre las estaciones Tribunales y 9 de Julio, donde dos personas sufrieron desvanecimientos y debieron ser atendidas por médicos del SAME.