SANTIAGO DEL ESTERO.- Una joven madre sufrió graves quemaduras cuando su pareja -que fue detenido- la roció con alcohol puro y acercó un encendedor, luego de haber mantenido una discusión (porque la mujer queria terminar la relación) en una vivienda del barrio Villa Griselda de La Banda, informaron fuetnes policiales. El agresor quedó bajo arresto acusado del delito de lesiones graves por el ataque perpetrado ayer a la mañana y que fue presenciado por la hija mayor de la víctima, que tiene 6 años.
Aproximadamente a las 9.30 del viernes, se suscitó una pelea entre la pareja integrada por María Belén Lange y Miguel Ángel Navarro. Para ubicar en contexto la historia hay que decir que Lange tiene 22 años, una hija de 6 y otra de dos de una pareja anterior, además de una beba de meses con su actual concubino, el "Colo" Navarro, de 19 años.
La hija de 6 años de María Lange fue la que contó que la mujer fue agredida por Navarro, primero con golpes de puño y luego, aunque cueste creerlo, con disparos de rifle de aire comprimido. Como si esos hechos demenciales no fueran suficiente agresión, el joven concubino luego tomó un cuchillo y corrió a la mujer amenazándola. Los insultos continuaron y en determinado momento la mujer tomó un frasco de alcohol para hacer una curación a su beba de cuatro meses. Fue entonces cuando Navarro le quitó el recipiente y volcó el contenido de la botella sobre el cuerpo de Lange,su contenido sobre el cuerpo de su concubina, con la que tienen en común a la beba, pues los otros dos niños que se encontraban en la casa son sus hijastros.
Con un encendedor amenazaba que la iba a quemar, hasta que finalmente lo acercó demasiado y las prendas de vestir de la joven comenzaron a arder. Si bien el causante del siniestro se encargó de apagar las llamas, Lange sufrió graves heridas en la cabeza, el cuello, parte del torso y el brazo izquierdo, detallaron las fuentes. Los médicos que la atendieron en el hospital Antenor Álvarez de La Banda diagnosticaron que se trataba de quemaduras de primero y segundo grado. "Perdoname, perdoname", dicen los vecinos que gritaba Navarro cuando se lo llevaban detenido.