"La mayoría de los astrónomos creemos en la vida extraterrestre", afirmó hoy Hugo Levato, director del Complejo Astronómico El Leoncito, ubicado en la provincia de San Juan y considerado uno de los más importantes observatorios de América Latina.
La posible existencia de vida fuera del planeta Tierra generó siempre discordias casi irreconciliables: los más escépticos, amparados en posturas sino científicas al menos cientificistas, la rechazaron de plano.
En un ámbito menos disciplinado, más conjetural e imaginativo, diferentes pensadores poblaban lugares lejanísimos con seres extraterrestres llamativamente similares a los habitantes de nuestro planeta (ya fueran hombres o plantas).
Hoy en día, por el contrario, los científicos piensan que el universo es tan grande y el azar tan caprichoso que sería inocente creer que las condiciones para que apareciera vida se hubieran dado únicamente en nuestro planeta.
"Actualmente, más o menos se sabe que no hay otra vida en el sistema solar, pero lo que la mayoría de los astrónomos piensa es que en algún distante sistema planetario puede haber otro tipo de vida", explicó Levato.
El científico adhirió a esta última postura y aseguró que, dado que los hechos que producen las diferentes formas de vida son "puramente azarosos", sería "muy extraño" que en ningún otro planeta se dieran las condiciones para que se desarrollen diferentes organismos.
"En definitiva, no existe ninguna razón física por la cual, en un planeta ubicado a 150 millones de kilómetros de un sol central (como el nuestro) no pueda haber surgido algún tipo de organismo vivo", agregó.
Por otra parte, el astrónomo explicó que el concepto de vida no es estático sino que se está ampliando. De hecho, un estudio reciente demuestra que las moléculas que conforman a los seres vivos podrían ser de un elemento totalmente diferente al carbono, base de la vida en nuestro planeta.
En el marco de la entrevista, además, Levato contó que se dedicó a la astronomía recién después de jugar al fútbol semi-profesionalmente con Pelé y de fallar en una prueba de vista cuando iba en busca de su sueño: pilotear aviones.
"En realidad podría haber hecho cualquier otra cosa, como por ejemplo física, pero pasé por el observatorio de La Plata y me quedé", narró el astrónomo, que participó en la reunión de Viena en la que se despojó a Plutón de su condición de planeta.
Por otro lado, admitió que dentro de su disciplina de estudios hay varios personajes locos, a los que prefirió llamar "poco mundanos", aunque aseguró que él no era uno de ellos.