Una madre intenta frenar la operación de cambio de sexo de su hijo (que nació mujer, pero queya tiene DNI que lo identifica como hombre y ahora quiere operarse) acusando a la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) de “utilizar políticamente” el caso del joven de 22 años. Y asegura que los trámites de la operación avanzan sin que tenga el “apoyo psiquiátrico” necesario, según su denuncia.
Se trata de Gabriela Ferrazzano, quien ayer hizo circular por varios medios una carta denunciando el caso de su hija. En ella califica a la “CHA” como una “secta”, que tiene un “inmenso aparato de propaganda” y un “poder político inmenso derivado de la propia Presidenta de la Nación (Cristina Fernández de Kirchner)".
La mujer asegura que su “hija” (a la que sigue llamando con su nombre de mujer aunque ya tiene identidad de hombre) comenzó con esta idea apoyada por la madre de su pareja, una joven de su edad, y que las llevó a ambas a atenderse con una terapeuta de la CHA para proceder en el tratamiento psicológico previo a la operación, aunque asegura que la profesional no es la idónea para este tratamiento.
En la carta, donde detalla nombres y algunas interconsultas que dice haber intentado realizar, y donde asegura que algunos profesionales consideran apresurada la decisión de la joven, Ferrazzano no sólo acusa a la CHA sino que señala que esta organización tiene el apoyo del gobierno nacional “por razones netamente electorales”.
Según la mujer, su hijo “tiene un trastorno de personalidad producto de la muerte de su padre y en su estado de debilidad, está siendo manipulada por la secta CHA”.
“Me temo que la secta CHA está usando a mi hija como leading case para presionar a todas las obras sociales para que financien las cirugías de cambio de sexo, aún ante opiniones en contrario de diversos profesionales”.
Perfil.com consultó con la CHA, donde aseguraron que no harán declaraciones al respecto para “proteger” al joven. “Es una madre que no acepta el cambio de identidad de su hijo. A veces pasa. Él ya tiene incluso su nuevo DNI, es mayor de edad, está bien acompañado por profesionales y la ley lo ampara”, se limitaron a decir.
