El cantautor Ignacio Copani volvió a ponerse la camiseta K, componiendo y cantando una canción que podría transformarse en otro hit, y está dirigido al vicepresidente Julio Cobos, despotricando contra su figura por considerar que con el “voto no positivo” en contra de las retenciones “usted de mi confianza se ha burlado arteramente”, señala en una estrofa de la canción.
La controvertida canción, en la que llama a Cobos como “señor vicepresidente” una y otra vez, acusa al mendocino de “faltarle la decencia”. Además, le pide disculpas por “no putearlo” y luego aclara: “Si usted no vale siquiera, que yo me esfuerce al putear”.
Copani ya había generado polémica con el tema “Cacerolas de teflón”, que compuso el año pasado contra los cacerolazos que se quejaron por las retenciones al campo, en pleno conflicto del Gobierno con el sector agrícola, y hasta denunció que por ese tema fue amenazado a través de cartas y mails.
A continuación, la letra completa de la canción dedicada a Julio Cobos:
Señor vicepresidente,
Qué valiente
Perdón que no lo tutee,
Yo tuteo a mis hermanos
A mis amigos y a mi gente,
Y usted de mi confianza
Se ha burlado arteramente
Entonces por qué tutearlo,
Con la T en la inicial
Si usted no merece trato
Ni saludo familiar.
Señor vicepresidente,
Doble agente,
Ya no me vicepresida
Aunque un empleo corriente
No es muy fácil que consiga,
Tal vez de arquero suplente
O fabricando discos truchos
O mejor de carpintero
Con su afilado serrucho.
Señor vicepresidente
Qué tonto es hacerse el vivo
Decídase ciertamente
Si es activo o es pasivo.
Señor vicepresidente
Le sugiero otro adjetivo
Llámese directamente
Señor vice negativo.
Señor vicepresidente,
Toy caliente...
Perdón que no lo putee,
Pero una buena puteada
Lo convierte en más decente
Y a usted, señor, la decencia
Le ha faltado últimamente,
Entonces por qué putearlo
Con la P en la inicial,
Si usted no vale siquiera
Que yo me esfuerce al putear.
Señor vicepresidente,
Incoherente...
Ya no me vice traicione.
No repte como serpiente
Conspirando en los rincones,
Mejor búsquese un trabajo
Y límpiese el orgullo roto,
Aunque quien va a contratarlo
De ayudante o copiloto.
Señor vicepresidente,
Por ahora me despido.
O dicho correctamente,
Yo me quedo,
Usted se ha ido.
Porque el voto de la gente
No se arroja en el olvido.
Señor vicepresidente,
Es usted el despedido.
Señor vicepresidente,
Qué se siente.
Señor vicepresidente,
Repelente...
Deprimente.
Suficiente.