Dos chicos de 8 y 11 años, un joven boliviano de 25 y un hombre de 61 (masajista de Racing) murieron hoy electrocutados por rayos en los partidos bonaerenses de Florencio Varela y Luján. Además, otros nueve chicos, que junto a los niños fallecidos asistían a una colonia de vacaciones organizada por el Obispado de Quilmes, sufrieron diferentes heridas como consecuencia del shock eléctrico causado por los rayos. Según se informó, uno de ellos está muy grave.
El doctor Leandro Buzo, jefe de Pediatría del Hospital El Cruce, de Florencio Varela, confirmó los decesos de los chicos de 8 y 11 años. Uno de ellos, indicó el profesional, ingresó ya fallecido, mientras que el menor murió a dos horas de llegar al sector de terapia intensiva. Buzo reveló que hay otro chico internado en "estado crítico", mientras que ya en terapia intermedia otros tres nenes, fuera de peligro.
Por su parte, cinco chicos, que también padecieron en diferente grado los efectos de la tormenta eléctrica -algunos sufrieron quemaduras y otros un shock eléctrico-, quedaron alojados en el Hospital Mi Pueblo, también de Florencio Varela. Todos los niños, de entre 7 y 11 años, fueron alcanzados por los rayos cuando habían salido de una pileta de natación y caminaban entre los árboles en un predio deportivo situado en la localidad de Bosques, partido de Florencio Varela.
Aníbal Montes de Oca, director médico del Hospital Mi Pueblo, señaló que un joven de 25 años, de nacionalidad boliviana, falleció también como consecuencia de la tormenta de rayos. La víctima fue llevada en un auto particular junto a una joven de 22 años, integrante de su familia. Ambos se encontraban en una zona de quintas situada lejos del predio deportivo de Bosques.
Por su parte, a más de 50 kilómetros de Florencio Varela, en la localidad bonaerense de Open Door, partido de Luján, la caída de un rayo provocó la muerte casi instantánea de César Nardi, el masajista del plantel de Racing, durante el entrenamiento vespertino del equipo.
En tanto, varios jugadores del conjunto de Avellaneda, especialmente el mediocampista Brian Lluy, fueron afectados por la descarga eléctrica, aunque se encuentran fuera de peligro.