Desde el martes próximo, viajar en subte será más caro. La regla de pagar $ 3,50 por cada viaje regirá para todos los pasajeros excepto para aquellos que sean beneficiarios de planes sociales administrados por los gobiernos nacional o porteño, personas en situación de desempleo crónico, quienes acrediten ingresos familiares por debajo de la canasta básica del Indec, indigentes, beneficiarios del subsidio por la tragedia de Cromañón, ex combatientes de Malvinas y todos los grupos identificados como con necesidades especiales o en situación de alta vulnerabilidad social. Para todos ellos, la tarifa quedará congelada en $ 2,50. Sin embargo, el subsidio no será fácil de obtener, y de hecho, antes de ser implementado ya genera diferencias entre representantes del oficialismo y opositores.
La primera crítica que acumuló en pocas horas la medida tiene que ver con que el subsidio no alcanza a aquellos que cobran planes en la Provincia o el resto del país. Por tal motivo, desde el bloque del Frente para la Victoria calificaron el beneficio como “restrictivo”.
Para el legislador porteño Rafael Gentili (Sumar I+D), “la medida es pijotera. No se entiende el criterio por el cual un indigente debe pagar $ 2,50 y un jubilado, que en teoría estaría mejor económicamente, viaja gratis. Además, en el gobierno porteño miran las cifras del Indec para subsidiar el pasaje de, por ejemplo, los que tienen ingresos por debajo de la canasta básica, pero para justificar el aumento de los subsidios a Metrovías se guían por las cifras de inflación que ellos elaboran”, reclamó.
Por otra parte, quienes puedan acreditar que pertenecen a uno de los grupos antes mencionados no podrán comprar los pasajes en cualquier boletería. Deberán acercarse –sólo de lunes a viernes entre las 8 y las 17.30– a los centros Subtepass, que son solamente tres en toda la red: Federico Lacroze (línea B), Av. de Mayo (línea C) y 9 de Julio (línea D).
Otros puntos polémicos de la tarifa social son el costo y las limitaciones. El monto actual de cada viaje ($ 2,50) pasará a ser el nuevo boleto subsidiado. Aquellos que accedan al beneficio sólo podrán viajar hasta cuatro veces por día. Fuentes del gobierno porteño indicaron que la limitación para el uso de abonos tiene que ver con asegurar la no transferibilidad.
Amparo. El legislador Alejandro Bodart (MST-Nueva Izquierda) presentó el jueves su apelación al fallo que autorizó el aumento del boleto. En el escrito, el diputado adjuntó el informe de la Auditoría porteña que marca una tarifa técnica del servicio de entre $ 5,01 y $ 5,62, muy lejos de los $ 7,47 que había argumentado el gobierno de la Ciudad.