El color oscuro del agua que inundó distintos sectores de La Plata llamaron la atención de vecinos y ambientalistas. La respuesta está en la explosión de la destilería de YPF que se encuentra en Ensenada. “El humo provocado por el incendio en las instalaciones es un material particulado, compuesto mayoritariamente por partículas de carbono que se presenta en forma de carbón molido muy fino y se deposita en superficies horizontales”, explicaron desde la empresa.
Pero miembros de Greenpeace denuncian que se están minimizando las consecuencias ambientales. “Este tipo de empresas trabajan con hidrocarburos y seguro que esta nube de hollín que envuelve a la gente es tóxica y peligrosa, pero son las autoridades las que tienen que evaluar la toxicidad”, sostiene Lorena Pujó, de Greenpeace.
“Minimizan el incidente”, denuncia. Según informó el Organismo para el Desarrollo Sostenible (OPDS) la muestra de los compuestos orgánicos volátiles “resultaron por debajo de los niveles que pueden ser nocivos”.
Pero para un veredicto final todavía faltan tener los resultados de las muestras del suelo que envió a analizar la OPDS.
