El cadáver del cetáceo quedó encallado en la costa. Está en descomposición y ya duplicó su tamaño.
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AFP
Redacción de Perfil.com
La aparición de una ballena azul muerta en las costas del pueblo canadiense de Trout River, en la isla de Terranova, convulsionó a los habitantes de ese lugar. Mientras las autoridades no saben qué hacer con el cadáver, alertaron a la población que no se acerquen a él, por temor a una explosión.
El cuerpo tiene unos 25 metros de largo y quedó varado frente a un paseo marítimo. Según consigan agencias internacionales, los lugareños aseguran que se está llenando de gas metano, produciendo un fuerte hedor. Ese mismo proceso provocó que el animal ya duplicara su tamaño, con lo que podría explotar.
El problema es qué hacer con él. Emily Butler, funcionaria municipal de Trout River, argumentó que la comuna no tiene recursos suficientes para hacerse cargo del problema, mientras el gobierno central considera que es responsabilidad del pueblo.
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Según explicó la mujer a la cadena de televisión NTV, no es posible empujar la ballena de vuelta al mar sin poner en riesgo a los barcos que navegan frente a sus costas.
