SOCIEDAD
fallecio un chico de 20 años y hubo varios menores heridos

Tras la tragedia de Moreno, buscan cómo regular las fiestas ‘clandestinas’

Un diputado bonaerense presentó esta semana un proyecto de ley, mientras que otros impulsan audiencias en toda la provincia. Polémica por falta de anticipación y control.

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Quinta. El lugar donde se realizó la fiesta Proyecto XXX, que llamaba a ir armados. Allí murió acuchillado Nicolás Rivero (20). | Telam
La muerte de un joven de 20 años en una fiesta clandestina en Moreno reabrió esta semana el debate sobre los controles nocturnos, sobre todo para este tipo de convocatorias, que se repiten en casas y quintas del conurbano bonaerense, hasta donde llegan menores de edad, a través de las redes sociales, y donde circulan drogas y alcohol sin control. En el caso de “Proyecto XXX”, que terminó en tragedia, el llamado era también a ir armado.

Y si bien en la provincia de Buenos Aires existe un “código de nocturnidad” (dentro de la Ley 14.050), que regula la actividad de boliches y bares, y contempla también los requisitos que deben tener las fiestas “privadas” –desde habilitación municipal, baños químicos, seguridad y ambulancia–, estas fiestas siguen esquivando los controles.

En ese contexto, el diputado del PRO César Angel Torres, del bloque Cambiemos, presentó esta semana un proyecto de ley que apunta a regularlas directamente. Incluye desde la notificación con veinte días de antelación al municipio, hasta la presentación de la documentación de la casa o quinta, hasta los permisos del Registro Unico de Bebidas Alcohólicas (Reba). Respecto a cómo prevenirlas, sostiene que “en Vicente López -donde fue Secretario de Gobierno-, donde no teníamos una gran estructura armamos un equipo con móviles dando vueltas, inspectores en la calle y gente controlando en las redes sociales las convocatorias a fiestas”, dice apuntando a una falla en el control del municipio.

Para Lucas Chedrese, secretario de Gobierno de Moreno, “para descubrirlas, necesitás trabajo de prevención e inteligencia, que son herramientas que el municipio no tiene, es una tarea de la Provincia y de la Nación”, dice, a la vez que confirma que estas fiestas se expanden en el conurbano.

Por su parte, los diputados Maximiliano Abad (UCR-Cambiemos) y Ricardo Lissalde (Frente Renovador) anunciaron que impulsarán audiencias públicas en el interior de la provincia para abordar la problemática y también otorgarle un marco legal.

CЧmo son. Las fiestas clandestinas, desde raves hasta de reaggetón, copan quintas, casas en alquiler y espacios privados al aire libre. Las fiestas electrónicas, por ejemplo,  rondan los $ 400 la entrada y se nuclean en la zona norte. Las drogas sintéticas se venden dentro, y por lo general la dirección se envía el mismo día del evento por mensaje de texto o mail.

“Proyecto XXX” cae en otra categoría de “clandestinas”: son fiestas organizadas en quintas del conurbano oeste o sur, y la convocatoria es a través de las redes redes sociales, dejando un número celular para comunicarse. Las entradas van desde los 30 a los 80 pesos, dependiendo si hay transporte, a lo que se le suma una consumición. La ganancia deriva de la venta de bebidas alcohólicas y drogas.

Más convocatorias para este fin de semana
“Proyecto XXX no fue una fiesta, eran barrios peleándose y fue un ajuste de cuentas”, dice Ailén Noseda, una de las asistentes a la fiesta que terminó en tragedia. Los grupos de Las Catonas y Trujui, dos barrios de Moreno, protagonizaron los violentos hechos en el Día de la Primavera y luego incitaron en las redes a “hacer bardo” y “terminar lo que habían empezado” el día de la fiesta. “El 23 hacemos punta en el fiador ”, escribió un usuario en Twitter, en referencia al predio municipal al lado de la estación de José C. Paz. En este contexto, surgió también una nueva convocatoria para otra fiesta en Morón este fin de semana, que incluso replicaba el nombre. La convocatoria desapareció de Facebook, pero 250 personas habían confirmado su asistencia. El precio de la entrada era una bebida.