Luego que Argentina se posicionara como campeón de la Copa del Mundo, los medios e influencers de todo el globo se preguntaron sobre los argentinos, sus cualidades, defectos y virtudes que nos caracterizan hoy como fenómeno global. Si bien hay varias teorías que aportan hipótesis sobre nuestra argentinidad, la genética puede brindar datos contundentes.
En este sentido, Adrian Turjanski, Director Científico de Bitgenia e investigador, aseguró que: “la evidencia genética y arqueológica indica que todos estamos genéticamente relacionados. La especie humana comparte un origen evolutivo común, que se originó hace unos 200 mil años en África. Esto quiere decir que todos compartimos una parte de nuestro ADN”.
Sin embargo, en los últimos 100.000 años se fueron diferenciando las poblaciones luego de dispersarse desde África hacia otras partes del mundo. Así, fueron modificando sus características en base a la región en la que se asentaron, generando diferentes rasgos como diversas tonalidades de piel, el color de ojos, la altura, entre otros aspectos característicos.
A través de un test genético, es posible determinar la composición del genoma de cada individuo en relación a los diferentes grupos poblacionales. Este estudio de ancestría genómica identifica las variaciones en el ADN de las poblaciones humanas en diferentes regiones geográficas, y a lo largo de su historia genealógica poblacional. Es así que podemos saber si alguien tiene origen africano, europeo u americano, e incluso analizar poblaciones como los ibéricos, los finlandeses o japoneses.
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En base a los test genéticos que se han realizado en Argentina, podemos identificar algunos datos de relevancia que permiten determinar cómo se compone la población argentina:
Cosmopolitas. Si bien no hay persona que cuente en su ADN con un único origen, la gran mayoría tiene antecedentes que van más allá de un solo continente. “Como era de esperar, los datos aportados por la base genética indican que la gran mayoría tiene al menos un porcentaje de origen europeo, y muchos tienen algo de ibérico o toscano. Porcentualmente podemos definir de dónde vienen los genes de los argentinos: un 40% de Europa, un 25% de Asia, sólo un 20% es de origen americano y un 10% es africano”, destacó Turjanski.
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Asimismo, el investigador revela datos sobre la genética que pueden clarificar ciertos mitos que circularon a partir del Mundial:
¿No hay gente de origen africano en la selección? "Si bien el 10% de los argentinos tiene ancestría africana, en promedio el ADN de ese 10% está muy mezclado y el origen africano representa menos del 5% de su ADN. Con lo cual, es probable que recién tengan un bisabuelo de origen africano. Esto muestra que, si bien en Argentina hubo una población importante de origen africano en la época de la colonia, mayormente esclavos, los que sobrevivieron se mezclaron significativamente con los inmigrantes de otras regiones", analizó.
¿En Bangladesh son argentinos o los argentinos somos bangladesíes? Sobre este punto el investigador fue contundente: "Alrededor del 8% de los argentinos que se realizaron un test genético en Argentina tiene algo de ADN de Bangladesh. Este número resulta sorprendente y hace pensar que estamos más emparentados de lo que pensamos con esta población. Sin embargo, se trata de un aporte genético que viene de larga data porque cada persona que se analizó no tiene más de 2% de su ADN identificado con esta población".
Los judíos de Europa y una fuerte impronta. "Otro rasgo interesante es que sólo el 1% de los argentinos que se hicieron el test tiene origen Judío Ashkenazi. Y de este porcentaje, el origen en general es mayor al 50% de su ADN, esto quiere decir que si bien hay poca gente de origen judío de Europa del Este, cuando está presente, ese origen suelen tener al menos un padre cuyo ADN pertenece casi en su totalidad a esa región", finalizó Adrián Turjanski.
