Con cantos y batucada, por momentos entonando el himno a viva voz, la infinita columna fracturó la 9 de Julio en horario pico y miles de personas marcharon en defensa de la educación pública universitaria.
Alumnos y docentes, secundarios y universitarios por igual, respondieron al llamado. Algunos bajo la bandera de los diversos centros de estudiantes. Otros con sus agrupaciones. También en forma independiente, como Natalia, de 16, que dice no creer en los políticos y por eso marcha "para que no le roben un peso a la educación". No advierte, cuando lo dice, que por su lado pasa el ex senador Eugenio 'Nito' Artaza.
Marcha Nacional Universitaria: mucho más que un conflicto gremial
La crisis de las últimas horas parece haber atizado los espíritus de quienes hoy se volcaron a las calles. "Repetimos la historia. Otra vez el Fondo. Otra vez la tijera. Parece mentira. No aprenden más que la educación no es un privilegio para pocos. ¡Es un derecho!", sostiene Víctor, docente primario de una escuela de Lanús. Camina bajo la bandera de Ctera y, de tanto en tanto, agita su propia pancarta, una borroneada, escrita con crayones que no resisten el aguacero.
Alguien canturrea casi en soledad unos versos. Pronto se suma otro que lo escucha y en seguida son un coro. "Mauricio Macri la p... que te parió, Mauricio Macri la p... que te parió..." se transforma en un grito de guerra que se extiende desde Florida a Piedras, al ritmo de un dúo de redoblantes. "¡Fuera, fuera, fuera Macri fuera!", entonan al unísono.
En tiempos de pañuelos y consignas cromáticas, un mantero vende los pañuelos azules "en defensa de la educación pública". También los hay verdes y naranjas, hasta algun tímido celeste, y compradores para todos los colores. El grito por la educación pública parece cortar al resto de los debates en forma transversal.