El ex portero Jorge Mangeri, condenado a perpetua por el crimen de Ángeles Rawson, insistió hoy con que él no violó ni mató a la adolescente en 2013, y comparó su situación con el "asesinato" del fiscal Alberto Nisman a raíz de la "intromisión del Poder Ejecutivo" por parte del entonces secretario de Seguridad, Sergio Berni.
"No soy un asesino, no soy un violador", aseguró desde la celda que ocupa en el penal de Ezeiza e insistió en denunciar que durante la investigación del crimen fue "amenazado y torturado por personal policial". "Fui sometido por el subcomisario de homicidios de la Policía Federal, Martín de Cristóbal, a cobardes amedrentamientos dentro de la fiscalía, apretándome, torturándome psicológicamente", reforzó.
En diálogo con Infobae, también trató de negar las pericias que encontraron sus rastros genéticos en el cadáver de Ángeles al aseverar que "el ADN lo plantaron" y señaló que "el servicio de huellas digitales genético de la Nación hizo las cosas mal y se comprobó en el juicio".
"La nena no fue violada y no hubo intento de violación, eso es mentira. Es una conjunción para determinar un móvil, una causa y un proceso", sostuvo el ex encargado del edificio de Ravignani 2360 al negar que Rawson haya sido abusada. "Hay algo de la autopsia que no se dijo y que nadie quiere contar pero que está. Es grave. Algo que tiene que ver con la revisión del cuerpo, la anatomía de la nena, todo el mundo lo sabe", siguió.
Política. Mangeri, durante la entrevista, señaló que en la investigación "estaba la política en el medio" y puso de ejemplo que el entonces secretario de Seguridad, Sergio Berni, "estuvo en la autopsia, se reunió con el juez de instrucción, en el CEAMSE, se reunió con la familia de la víctima...".
"La intromisión del Poder Ejecutivo en mi causa es similar al asesinato de (el fiscal de la causa AMIA Alberto) Nisman. En el departamento del fiscal muerto estuvo Berni y el comisario inspector, Rodolfo Gutiérrez, que me allanó de forma ilegal mientras estaba haciendo la declaración testimonial. Los dos son claves en mi causa y aparecen en la de Nisman", disparó.
También sostuvo que en la investigación hubo un "juego perverso" para determinar que "el asesino era yo y el delito me lo tenían que poner a mí. Estaba todo armado desde la fiscalía, para que saliera esa noche como responsable del hecho".
Mangeri confió que tiene "6 ó 7 hipótesis" sobre el crimen y sostuvo que "hablando con otros presos, me dicen que fue fulanito de tal. Que puede ser esa hipótesis, puede ser...", sentenció.