En su afán de hacer cumplir a rajatabla la sharia, su interpretación estricta y extrema de la ley islámica, los talibanes prohibieron a los barberos y peluqueros cortar o recortar la barba de sus clientes en todo Afganistán. Quienes no respeten las reglas, serán castigados.
Un corresponsal de la cadena británica BBC lo informó hoy, al ver un cartel que así lo advertía en varios salones de barberos y peluqueros en la provincia sureña de Helmand y también en la capital del país, Kabul. La advertencia culminaba con la orden "Nadie tiene derecho a quejarse”.
La periodista informó que, a escondidas, un afgano le comentó que un peluquero de hombres, en Kabul le dijo que “los talibanes podían enviar inspectores encubiertos", para controlar el cumplimiento de la sharia.
También trascendió que otro peluquero de uno de los salones masculinos más visitados por los hombres de la ciudad, había sido intimado por los fundamentalistas llamados “estudiantes coránicos”. Los jóvenes que se ufanan de dedicar su vida cotidiana a interpretar el Corán, el libro sagrado del Islamismo, le advirtieron que "dejara de seguir el estilo estadounidense" en sus cortes de pelo.
Talibanes a la caza de peluqueros
Los periodistas europeos que cubren corresponsalías en Kabul, recorren la capital en busca de nuevos testimonios. "Los clientes no se cortan la barba para no ser atacados por los milicianos talibanes en la calle", dijo a media voz otro peluquero en la ciudad de Herat, un importante enclave comercial que fue noticia el 25 de septiembre, cuando cuatro cadáveres aparecieron colgados en la vía pública, acusados de haber secuestrado a un empresario.
El vicegobernador de Herat, Sher Ahmad Ammar, dijo que aún no recibió una orden formal de la policía religiosa para hacer cumplir esta ley Sharia.
Desde que los talibanes regresaron al poder de Afganistán, a partir de la toma de la capital el 15 de agosto de 2021, toda la población y sobre todo las mujeres, temían que regresara la era del terror civil que habían vivido entre 1996 y 2001, también bajo el dominio talibán.
Sin embargo, la ley islámica que imponen los talibanes como nueva ley de conducta para los musulmanes afganos es sumamente radical. Rige los códigos de vestimenta, la educación, los hábitos cotidianos, la alimentación, las plegarias e incluso el uso del dinero.
La Sharia tiene fuerza de ley y varía en cada país islámico, según la interpretación que hagan los estudiosos del Corán y las enseñanzas de Mahoma.
