Clases de cerámica: Cómo es la experiencia del fenómeno elegido por personas de todas las edades

Como una forma saludable de “desconectarse” del mundo virtual, muchas personas comenzaron a buscar la forma de reconectarse con su interior. Las clases de cerámica, es una de las más elegidas en los últimos años y reúne la atención de personas de diferentes edades.

En qué consiste el curso de cerámica

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con las hermanas Paz y Camila De Urquieta quienes contaron que, “muchas mujeres y bastantes hombres practican cerámica, convirtiéndola en una actividad bastante popular”. 

Según las entrevistadas, en su taller se ofrecen clases grupales, donde la gente una vez por semana llega a esa espacio para crear sus piezas, y “luego nosotras nos encargamos de hornearlas”. “Ofrecemos un paquete completo de servicios, en donde organizamos experiencias para grupos familiares, amigos e incluso empresas, donde pueden disfrutar de una clase de cerámica puntual”, comentaron.

Los talleres: ¿Son una salida laboral?

Al ser consultadas sobre la posibilidad de que los alumnos abran sus propios talleres, las hermanas De Urquieta contaron que, “es un  orgullo ver que muchas personas que han pasado por nuestras clases terminan abriendo su propio taller o produciendo sus piezas en casa para vender”. Y agregaron: “Nos encanta haber influido en su camino profesional y ayudado a cambiar su percepción del trabajo”.

En continuidad con el tema, las entrevistadas mencionaron que también hay quienes venden una pieza y con esa plata “cubren el costo de toda la cuota mensual del taller de cerámica, lo que les permite seguir creando sin preocuparse por los gastos”.

Con respecto a cuáles son las piezas que se crean con más tendencia, las artistas aseguraron que, “van cambiando” pero, en la actualidad “hay un furor por las lámparas”. “Sin embargo, lo que más se produce son tazas y macetas, y la primera pieza siempre es un bowl, como una bienvenida al taller”, contaron.

De la venta a los talleres: Cómo es el cambio de rumbo 

Por otra parte, las hermanas comentaron que solían vender piezas al por mayor y al por menor, pero este año “decidimos dejar temporalmente la venta debido a una disminución en la demanda”. Y continuaron: “Seguimos con el taller porque es muy valorado como una inversión personal, un momento para relacionarse con otros y desconectarse del día a día”. 

En la actualidad, los talleres tienen 90 personas que semanalmente acuden a aprender y “se mantienen en los cursos por meses”, explicaron las hermanas De Urquieta. “Nuestros talleres están abiertos a niños de 6 a 12 años y a adultos de 15 a 81 años; mientras los niños suelen hacer piezas inspiradas en personajes de dibujos animados, los adultos tienden a alinearse con la estética del taller y hacen piezas más funcionales, como vajilla para su hogar, especialmente si están recién mudados o acomodándose”, agregaron.

Cómo se consiguen los insumos en el país

En referencia a los proveedores en la Argentina, las artistas contaron que hay muchos insumos para cerámica, como arcilla y esmalte, aunque este último puede presentar complicaciones. “A veces, los materiales importados necesarios para el esmalte no están disponibles y deben ser reemplazados por alternativas nacionales, lo que puede afectar el acabado final de las piezas y requerir nuevas pruebas de compatibilidad”, expresaron.

Para cerrar, dijeron: “En comparación con productos de bazar hechos de otros materiales, las piezas de cerámica hechas en nuestro taller tienen un valor único. Es mucho más rentable venir y hacer tu propia vajilla que comprarla ya hecha”.