Cítricos

José Carbonell: “Tenemos confianza respecto a la posibilidad de la apertura del mercado de Estados Unidos”

El director de la Federación Argentina del Citrus afirmó que el sector mira este acuerdo como un punto de inflexión para el crecimiento exportador.

Cítricos (Cedoc)

En diálogo con Canal E, José Carbonell, director de la Federación Argentina del Citrus, destacó que abrir el mercado estadounidense “cambiaría el futuro de la actividad”.

El sector citrícola argentino sigue con atención las negociaciones con Estados Unidos para permitir el ingreso de naranjas y mandarinas frescas. Carbonell aseguró que existe optimismo sobre la inminencia del acuerdo. “Tenemos algún nivel de confianza fundada respecto a la posibilidad de la inminente apertura del mercado de Estados Unidos para nuestros cítricos dulces”, afirmó. Para el dirigente, el mercado norteamericano está llamado a convertirse en el destino más importante para la actividad a futuro.

Carbonell subrayó que, más allá de que los efectos se verán a largo plazo, la habilitación sería un cambio estructural. “Eso realmente está llamado a ser el mercado más importante como país para el futuro de nuestra actividad”, resaltó.

Apertura de mercados y necesidad de mayor producción

El director explicó que hoy el cítrico dulce argentino se orienta principalmente al mercado interno y a la industria, dejando un espacio exportador marginal. De allí la importancia estratégica de abrir nuevos destinos. Ya se registraron envíos a Ecuador y se negocian otras plazas bajo gestión activa del Gobierno. En este proceso, Carbonell destacó que “el desafío del sector hoy es crecer en nuevos mercados”, tanto para fruta fresca como para jugos, aceites y cáscaras de naranja, segmentos en expansión.

La producción también se está preparando para un salto exportador: se están realizando nuevas plantaciones en el NEA y el NOA, apostando especialmente a la naranja. Consultado sobre el potencial impacto para los productores, sostuvo que la apertura estadounidense generará incentivos, aunque aclaró: “Lo que estamos hablando respecto a Estados Unidos es la exportación de fruta fresca”.

Respecto de los derivados industriales, la meta es ampliarlos: “Necesitamos disponer de mayor cantidad de fruta, mayor capacidad para abrir, porque hoy hay un mercado mundial que demanda el producto de la naranja”, enfatizó.

Pérdida de mercados, dificultades productivas y la apuesta al futuro

Carbonell reconoció que Argentina perdió presencia en mercados clave: “Se redujo mucho la presencia de Argentina en países como Indonesia, Filipina o Canadá”, además de retroceder en la Unión Europea por la mancha negra. A esto se agregan problemas climáticos: este año el NEA sufrió “una brutal helada” que redujo drásticamente la producción local y también la de Uruguay.

No obstante, la demanda internacional continúa firme y el desafío es contar con volumen suficiente. En este sentido, el antecedente del limón argentino en Estados Unidos es alentador: desde su ingreso en 2018, ese país se convirtió en el principal comprador. Carbonell destacó que, en fruta fresca, la exportación se trabaja contraestación, lo que mejora la competitividad.

En cuanto al impacto global de un eventual acuerdo, fue contundente: “En el mercado del fresco, la apertura del mercado norteamericano sería un paso muy importante”. Cerró la entrevista con optimismo: “Es la gran esperanza y expectativa del sector en este momento”.