“Lo que se perdió en la estampida inflacionaria del primer trimestre no se recuperó en la masa salarial”

La situación de los comercios de cercanía que se dedican a la venta de alimentos cada vez se complica más, la reducción del poder adquisitivo de los compradores repercute directamente sobre las ventas y eso provoca una fuerte caída en el consumo. En este contexto, este medio se comunicó con Germán Romero, director general del Centro de Almaceneros de Córdoba.

“El dato aislado individual parece ser bueno pero esta baja de la inflación, también impulsada por una desaceleración fuerte en el principal ítem de mayor ponderación, que es el rubro de alimentos y bebidas”, comentó Germán Romero. “Esa desaceleración tiene impacto en la inflación pero esa estabilidad en los precios de los alimentos se da por una fuerte caída de la demanda”, agregó.

El ritmo de recuperación de los niveles de venta no acompaña a los comercios

Posteriormente, Romero planteó: “La recesión trae como consecuencia una baja o una desaceleración de la inflación, los comercios de proximidad que comercializan alimentos perdieron en julio de 2024, comparado con julio de 2023, un 26,8%”. Luego, manifestó que, “hay una leve recuperación, pero a este ritmo, para el comercio se vuelve inviable que se necesiten 2 años para equiparar los niveles de venta”.

Los comercios tuvieron que desistir de su mano de obra ante la caída del consumo

“Estamos viviendo horas críticas, estamos en una instancia donde el comercio comienza a prescindir de mano de obra”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “Lo que se vende es de baja rentabilidad, el comercio tiene incrementos en sus costos fijos y una fuertísima histórica caída en sus ventas, entonces, con esta recuperación tan incipiente, los comercios no van a aguantar”.

Por otro lado, el director general del Centro de Almaceneros de Córdoba señaló: “Lo más preocupante son las familias que han cambiado su calidad de vida en todos los estratos sociales, pero cuando observamos la escala media hacia abajo, vemos severos problemas para reunir los componentes básicos que necesitan”.

“El poder adquisitivo está derrumbado, lo que se perdió en la estampida inflacionaria del primer trimestre no se recuperó en la masa salarial ni en las jubilaciones”, expresó Romero. “Con un poder adquisitivo tan retraído no va a ser fácil la recuperación”, finalizó.