Néstor Soto tenía una pizarra con los horarios de facultad de sus amigas según nuevas declaraciones

El juicio contra Néstor Soto por el crimen de Catalina Gutiérrez continuó este jueves en una audiencia donde declararon amigas en común del acusado y de la víctima. Los testimonios señalaron, al igual que en oportunidades anteriores durante el juicio, la forma "tóxica" que Soto tenía para relacionarse con sus amigas y que tenía en su habitación una pizarra con los horarios de la facultad de sus amigas.

Una de las amigas con quien ambos compartían el grupo más cercano de la facultad, Aylén Fernández, explicó al tribunal que Catalina "terminaba complaciéndolo a él" ante las constantes demandas de atención por parte de Soto. El noviazgo de Catalina con Ezequiel García, según comentó, angustiaba a Néstor por la "distancia del vínculo" que generaba, y allí alcanzó "el tope de toxicidad".

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Consultada por El Doce sobre algún intento de Catalina para terminar el vínculo de amistad, Fernández explicó que, si bien notaban la naturaleza tóxica de su relación, se basaba en "peleas, pero a su vez pasarla bien", aunque remarcó que "uno nunca pensó que iba a pasar esto". Cuando se enteró sobre la muerte de Catalina, señaló que pensaron que se podría haber tratado de un robo en la calle, pero al final "era la persona que teníamos al lado". "Cuando no estaba enojado era un amigo normal", concluyó sobre como Soto modificaba su comportamiento al estar disconforme con algo.

Otra declarante fue Catalina Rizzi desde Estados Unidos, amiga primero de Soto y luego de Gutiérrez, y que destacó el hecho de que al acusado "no le gustaba juntarse en grupo y quería juntarse de a dos". Rizzi se mostró consternada por haber mantenido una relación similar con Soto, por lo que consideró que lo podría haber sucedido lo mismo.

Tatiana Ceballos, ex compañera de la facultad de Néstor y Catalina, mencionó que él "ejercía violencia psicológica sobre el grupo" y que con la víctima mantenía una relación "obsesiva y controladora".

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Por último, se dirigió ante el tribunal Aldana Riquelme, compañera de Soto en Bariloche desde el nivel inicial hasta la secundaria, que apuntó contra Soto por haberle hecho bullying mientras fueron compañeros. También confesó que habló con otras compañeras después de enterarse del crimen de Catalina, que le confirmaron que "las acosaba".

Mientras la familia de Catalina aguarda al próximo martes para conocer la sentencia contra Néstor Soto, durante la audiencia de este viernes declararán dos amigos de Soto, uno conocedor de sus actitudes violentas y otro que fue a quien le habló la noche del asesinato. La declaración de Soto será el próximo lunes 17 de marzo.