El Banco Popular de China puso a disposición de Argentina US$6.500 millones provenientes de una línea de swap que comparten ambos países, anunció el miércoles el presidente Alberto Fernández tras reunirse con su homólogo Xi Jinping en Pekín.
La medida se produce días antes de las elecciones presidenciales que se celebran el domingo en Argentina, mientras la incertidumbre política agita los mercados y el tipo de cambio paralelo se dispara. Fernández dijo que originalmente se solicitaron US$5.000 millones y Xi otorgó US$1.500 millones adicionales.
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En declaraciones a una estación de radio argentina, Fernández dijo que la medida permitirá intervenir en los mercados de divisas y “terminar el año tranquilos”.
En total, Argentina tiene una línea de swap de US$18.000 millones con China que ha utilizado en ocasiones este año para pagar deudas con el Fondo Monetario Internacional y financiar importaciones, ya que el país sudamericano se ha quedado sin dólares, lo que ha dejado al banco central con un récord de reservas netas negativas.
Un vocero del Ministerio de Economía dijo que la parte activada del swap estaría disponible a partir del miércoles.
