La confrontación política se intensifica en Venezuela, a medida que el líder opositor, Juan Guaidó, y el aliado del gobierno que dice que lo reemplazó como jefe legislativo, anuncian planes para abrir una sesión en la Asamblea Nacional este martes.
Los anuncios en duelo tuvieron lugar un día después de que las fuerzas de seguridad del presidente Nicolás Maduro impidieran a Guaidó entrar a la Asamblea para evitar su reelección como líder. Guaidó llevó a sus seguidores a una sesión fuera del sitio donde condujo fácilmente la votación.
En declaraciones a periodistas en su oficina de Caracas el lunes, Guaidó dijo que el martes comenzará la sesión regular en el palacio legislativo. "Vamos a hacer nuestro trabajo”, anunció, afirmando que incluso podría celebrar la sesión vía internet si fuera necesario.
Simultáneamente, Luis Parra, un exlegislador de oposición ahora aliado con Maduro, tomó la oficina de Guaidó en la Asamblea y dijo que tenía el quórum y la legitimidad para el puesto, y que abriría una nueva sesión el martes. También dijo que restablecería la agenda legislativa y buscaría la reconciliación. Guaidó es bienvenido, agregó, pero solo como cualquier otro legislador.
Estados Unidos contra Rusia
Al validar el voto irregular en la Asamblea Nacional, Maduro se ganó el desprecio de la mayoría de América Latina, incluidos los gobiernos de izquierda de Argentina, México y Uruguay, que criticaron el incidente. Estados Unidos, que ha respaldado a Guaidó durante el año pasado, lo felicitó por ser reelegido, mientras que Rusia, que apoya a Maduro, calificó la elección de Parra como legítima y democrática.
Mientras que la administración Trump ha respaldado firmemente a Guaidó, la crisis actual sobre Irán puede distraer a Washington de involucrarse mucho. Ha impuesto severas sanciones a quienes hacen negocios con el gobierno venezolano. Venezuela tiene las mayores reservas de petróleo conocidas del mundo.
El lunes, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, llamó a Guaido y habló con él durante 10 minutos, felicitándolo por su reelección y reafirmando que es el único presidente legítimo de Venezuela. Una persona familiarizada con la llamada dijo que los dos también acordaron que este es un punto de inflexión para la libertad y la democracia en el país.
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Elliott Abrams, enviado especial a Venezuela del gobierno de Estados Unidos, dijo a periodistas que la administración está buscando sanciones nuevas y diferentes para presionar a Maduro. También dijo que Estados Unidos había subestimado el apoyo ruso y cubano.
La medida ciertamente puso de manifiesto la creciente confianza de Maduro en que, a pesar de la espiral de pobreza, hambre y disfunción del país, los esfuerzos de Guaidó para destituirlo, que llevan ya un año, están perdiendo fuerza.
Las calles, que el año pasado se llenaron de ciudadanos que apoyaban a Guaidó, no han visto muchos en los últimos días. Están casi vacías. El respaldo se encuentra ahora cerca del 40%, según Datanalisis. Sigue siendo el político más popular del país, pero la fatiga entre los ciudadanos comunes por la lucha de la vida diaria, junto con el pesimismo de que pueda expulsar a Maduro, han frenado su impulso.
Escándalo de corrupción
Parra, quien dice haber arrebatado el cargo a Guaidó, fue una vez su aliado, pero está atrapado en un escándalo de corrupción y ha sido recibido por Maduro. El lunes, habló desde la Asamblea Nacional y dijo que Guaidó había perdido el voto porque estaba retrasado.
Parra afirmó que fue elegido con quórum, pero declinó proporcionar un registro. Dado que la Asamblea está controlada por legisladores de la oposición favorables a Guaidó, algunos de los cuales no pudieron ingresar al edificio el domingo, el reclamo de Parra va más allá de la credulidad.
En su conferencia de prensa, Guaidó señaló una posible acción conjunta con Rusia. Llamó a las fuerzas de seguridad a abandonar a Maduro y lo acusó de intentar destruir todas las instituciones venezolanas.
Maduro controla todas las instituciones clave –los militares, el consejo electoral, el poder judicial–, excepto la Asamblea. Sin embargo, en esencia la ha despojado de todo poder legislativo y ha estado gobernando como autoritario.
En un aparente intento por reducir las tensiones y respaldar a Parra, el gobierno de Maduro anunció que liberará a 14 prisioneros políticos, luego de negociaciones con partidos políticos minoritarios que apoyan la elección de Parra. Entre los liberados se encuentran el fotoperiodista Jesús Medina y Carlos Marrón, propietario de un sitio web de información sobre cotización del dólar en el mercado negro.
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