Es probable que las temperaturas altas de este fin de semana se mantengan como tendencia durante el verano, según el pronóstico climático trimestral que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) elaboró esta semana. Además, prevén que las precipitaciones se mantendrán en un nivel entre normal e inferior al promedio en gran parte del país, a excepción del noroeste, donde podría llover más.
“La mayor probabilidad indica que será un trimestre de normal a cálido. Ya cambió el patrón de circulación más típico del invierno que se dio en noviembre. Ahora arrancamos con el patrón de verano”, explicó desde el SMN Cindy Fernández. La meteoróloga agregó que “si a la tendencia cálida de este verano se le suma menos lluvia, podrá darse una mayor cantidad de días despejados con poca humedad”.
Según el pronóstico trimestral, las temperaturas se presentarán en el rango superior a lo normal en la región de Cuyo, sur de Córdoba, La Pampa y oeste de Buenos Aires, y de normal o superior a lo normal en el noroeste, norte y este de Córdoba, sur de Santa Fe, centro-este de Buenos Aires y en la Patagonia. Esto significa que los porteños y los cordobeses podrán sentir máximas superiores a los 30 grados, y que la temperatura media será mayor a los 23. El Litoral y el noreste estarán dentro de lo normal.
En cuanto a las precipitaciones, hay mayores probabilidades de que sean de normales a inferiores en Córdoba, Santa Fe, Corrientes, Buenos Aires y las regiones de Cuyo y Patagonia. “Lo que muestra el pronóstico de manera general es que no se verán favorecidas las condiciones de precipitación, por eso podrían ser inferiores a lo normal. Pero ello no quita que, por ejemplo, no llueva en todo el mes y que un día llueva cien milímetros”, advirtió Fernández.
Además, aclaró que en caso de darse menos precipitaciones, no significará que haya sequía ya que ésta depende de otros factores, como el estado del suelo y de la geografía. Por otro lado, las lluvias extremas y los chaparrones típicos de verano podrán aparecer, por lo que los meteorólogos recomiendan seguir el estado del tiempo diariamente.
Vacaciones. Bajo este panorama, quienes vayan a veranear a la costa atlántica podrán tener días con una temperatura media (promedio entre la máxima y la mínima) superior a los 20 grados, o cuyas máximas y mínimas superen los 25 y 14°, respectivamente. En la costa también hay chances de que se den menos lluvias y que, por ejemplo en Mar del Plata, no lleguen al promedio de 110 milímetros mensuales de diciembre y febrero, los meses más lluviosos del año.
En Bariloche, las temperaturas podrán superar la media de verano de entre 13 y 14 grados y tener máximas de 20°, que en ocasiones han llegado a más de 30. La misma tendencia podría darse en Mendoza y Salta, con temperaturas medias de 23 y 21 grados y máximas de 30 y 27 cada una. En las ciudades de Bariloche y Mendoza es época de poca precipitación, a diferencia de Salta, donde puede llover entre 150 y 200 mm por mes.
Para quienes vayan a Brasil, el Instituto Nacional de Meteorología de ese país pronostica temperaturas por encima de lo normal en casi todo el país y precipitaciones inferiores al promedio en el sur. Mientras que el Instituto Uruguayo de Meteorología prevé condiciones dentro de lo normal hacia el sur del río Negro. En departamentos costeros como Colonia y Maldonado, en el trimestre la temperatura media rondará los 23 grados.
El pronóstico del SMN también indica que hay 73% de chances de que se desarrolle el fenómeno de La Niña al final del verano, a partir del enfriamiento de las aguas superficiales del Pacífico ecuatorial, que altera las condiciones atmosféricas no sólo en esa zona sino también en el Pacífico Sur. De darse, estiman que será de corto plazo y débil. “Eso en lo que se refiere al pronóstico de La Niña. Después está el pronóstico del impacto que puede producir sobre nuestro país, que tiene más incertidumbre porque no se puede prever cómo estará la circulación atmosférica que puede reforzar o inhibir la influencia de La Niña”, explicó Carolina Vera del Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera de la UBA.
2017 puede ser récord
“Si diciembre es muy cálido, podemos tener el año más caluroso de la historia a nivel país, por eso estamos con la expectativa de cómo se va a comportar este mes”, adelantó Cindy Fernández del Servicio Meteorológico Nacional. Hasta septiembre, 2017 se presentaba como el candidato a ocupar el primer puesto, pero las anomalías negativas de las temperaturas de octubre y el frío de noviembre impidieron que le quitara ese lugar a 2012, que superó el promedio anual con 0,7 grados centígrados.
De todos modos, es seguro que estará entre los tres primeros, y aún falta completar el mes. Los registros nacionales comienzan en el año 1961, y a excepción de 1989, que ocupa el noveno puesto con una anomalía que apenas supera los 0,4 grados, todos los años más cálidos se dieron en este siglo, por lo que los especialistas apuntan al cambio climático. Dadas las temperaturas de este fin de semana, 2017 podría ser el año más caluroso de los argentinos.