El Ministerio de Salud de la Nación confirmó el primer caso de síndrome congénito asociado a la infección por el virus del zika en la Argentina. Se trata de un bebé que nació en Tucumán a mediados de octubre y presentó microcefalia (menor desarrollo del cráneo y del cerebro) vinculadas a la infección por el virus durante el embarazo. Debido a las graves malformaciones, el chiquito murió a los diez días.
La confirmación de la infección por zika, tanto en el bebé como la madre, la hizo el Laboratorio de Referencia Nacional de Dengue y Otros arbovirus del Inevh “Julio Maiztegui” el 3 de noviembre, según consigna el último Boletín Integrado de Vigilancia de la cartera sanitaria.
Allí se puede leer que el nacimiento (por cesárea) ocurrió en la semana epidemiológica 42 (del 16 al 22 de octubre) en Tucumán y correspondió a un bebé de sexo masculino que presentó microcefalia (perímetro craneal de 31 cm), artrogriposis (rigidez) de las cuatro extremidades, bajo peso y malformaciones intracraneales. “Se tomaron muestras de suero y orina del recién nacido y, además, se obtuvo una muestra de la placenta. Por las complicaciones de salud, el niño falleció a los diez días”, informaron autoridades sanitarias.
La sospecha del caso se inició en septiembre a partir del control de un embarazo de 27 semanas de gestación en el que se detectaron malformaciones fetales compatibles con síndrome congénito asociado a la infección por zika, en una mujer sin antecedente de viaje ni sintomatología de la enfermedad durante su embarazo. Se cree que el caso está relacionado con el brote de la enfermedad que tuvo lugar en la ciudad de San Miguel de Tucumán entre fines de marzo y principios de mayo.
“A partir de notificar la circulación del virus zika en la provincia, vigilamos a todas las embarazadas. El caso fue detectado durante los exámenes que hacemos a todas las embarazadas con ecografias”, le explicó a PERFIL el doctor Rogelio Cali, jefe de Epidemiología del Ministerio de Salud de Tucumán. “En cuestión de su situación, se programó un parto acompañado por un equipo multidisciplinario para dar contención a la mamá. A pesar de todos los esfuerzos, el bebé falleció”, relató el especialista.
Alerta. El zika se transmite por la picadura del mosquito Aedes aegypti, el mismo que transmite el dengue y la fiebre chikunguña. Desde 2015 y hasta la fecha, 47 países de las Américas confirmaron casos autóctonos y 19 países casos de síndrome congénito asociados a la infección por zika.
En la Argentina, hasta el momento, no hay circulación del virus de acuerdo a la información recopilada en el último Boletín Integrado de Vigilancia. Durante este año se notificaron 25 casos autóctonos correspondientes al brote de Tucuman y otros diez importados. En total, son nueve las embarazadas con resultados postivos para la enfermedad: cinco casos fueron confirmados y cuatro clasificados como probables. Ocho pertenecen a la provincia de Tucumán y una reside en Córdoba pero adquirió la infección en otro país.
En cuanto a la vigilancia en recién nacidos, hasta el momento se estudiaron seis niños hijos de madres positivas para zika. Uno de ellos corresponde al caso del bebé fallecido, mientras que los otros cinco no presentan alteraciones: hasta el momento cuatro de ellos tienen resultados negativos para la detección viral y uno se encuentra pendiente, destaca el Boletín de Vigilancia.
“Muchas personas infectadas con el virus del zika no manifestan síntomas o sólo tienen síntomas leves, como fiebre, sarpullido y dolor en las articulaciones”, destacó Cali. Por eso, la recomendación a las mujeres embarazadas es hacerse los controles prenatales y no viajar a países donde actualmente haya circulación del virus.
Para prevenir la infección por zika se deben evitar las picaduras de mosquitos. Para eso, se recomienda: utilizar repelente y renovarlo cada tres horas y usar espirales, tabletas repelentes y mosquiteros. En el hogar, se aconseja eliminar recipientes en desuso que puedan acumular agua (latas, botellas, neumáticos), cambiar diariamente el agua de bebederos de animales y mantener los patios y jardines desmalezados.