El Ministerio de Salud vivió en los últimos 15 días los momentos más difíciles y convulsionados de los últimos años. La crisis generada por las muertes de bebés en el Hospital Materno Neonatal generó un verdadero terremoto, de consecuencias aún poco dimensionables, en la sede ubicada en el complejo Pablo Pizzurno.
El caso que ya está en manos de la Justicia derivó en la salida del titular de esa cartera, el ministro Diego Cardozo. En ese contexto, el gobernador Juan Schiaretti convocó a la bioquímica Gabriela Barbás, quien tuvo un rol central en el manejo de la pandemia, información que fue destacada en el comunicado emitido por la Provincia a través de sus redes sociales: “Barbás tuvo un desempeño principal en el abordaje de la pandemia y valiosa tarea en la articulación del sistema sanitario…”.
Según pudo averiguar este medio, la decisión del alejamiento de Cardozo empezó a gestarse el viernes en momentos en que el gobernador recibió a las madres de los bebés fallecidos en el Neonatal. Allí, tras escuchar en su despacho los crudos relatos de las mujeres, que entre otras cosas describieron el maltrato recibido, Schiaretti decidió hacer cambios en Salud y romper de esta manera con su habitual manera de actuar, la cual evita realizar cambios bruscos en su gabinete en medio de situaciones de conflicto.
A partir de allí comenzó a delinearse la llegada de Barbás, que se concretó pocos días después y de esta manera se transformó en la primera mujer al frente de esa cartera. Dueña de un perfil más técnico que político, la especialista en virología fue la apuntada y su nombre nunca se puso en duda como sucesora de Cardozo.
A lo largo de la pandemia demostró ser capaz de desactivar diversos tipos de conflictos, entre ellos el del vacunatorio VIP. En ese episodio Barbás tomó la posta luego de que Cardozo decidiera bajar su perfil público y fue la encargada principal de brindar explicaciones en torno a la lista de supuestos ‘vacunados VIP’ presentada por el legislador radical Marcelo Cossar, quien también en la actualidad es uno de los dirigentes opositores que más enfáticos se muestra a la hora de exigir explicaciones por lo ocurrido en el Neonatal.
La sanitarista cuenta con un perfil técnico muy marcado y un gran manejo de los medios de comunicación, el cual fue perfeccionando con el correr de los meses. Sus características personales y su imagen más técnica que política, fueron clave en conflictos del pasado.
Equipo técnico. Entre las condiciones impuestas por Barbás para asumir, quizás la más importante fue la de armar su propio equipo de trabajo. Un equipo conformado por profesionales conocidos por ella y con amplia trayectoria en la Salud Pública. La ahora nueva ministra, decidió modificar incluso a segundas líneas vinculadas a Cardozo, como el equipo de prensa, medida que no es tan habitual en cambios de este tipo.
Como secretaria de Promoción y Prevención de la Salud, Barbás eligió a Analía Cudola, con quien comparten una extensa trayectoria tanto en el Laboratorio Central de la Provincia como en el Ministerio. También asumieron Sergio Metrebian como secretario de Salud y Carlos Negro en el cargo de subsecretario de Gestión Hospitalaria.
Además, en una de sus primeras medidas como titular de la cartera sanitaria, designó a las nuevas autoridades del Hospital Neonatal: Marcelo Argüello asumió como director y Patricia Marino como subdirectora. Ambos llegan con un reconocido paso por el Hospital de Niños, institución que los tuvo a ambos, en distintos períodos, como subdirectores.
Primeras jornadas abocadas al Neonatal. Tanto el viernes como el sábado, Barbás estuvo abocada plenamente en tratar el tema central que atraviesa al Ministerio de Salud, las muertes en el Hospital Neonatal. Además de designar a las nuevas autoridades, recibió a una familia que perdió un hijo sano en ese nosocomio y que forma parte de una causa judicial en curso. El resto de las familias involucradas en la causa decidieron por el momento declinar la invitación que llegó desde Salud. En esa reunión privada, Barbás se comprometió a llegar “hasta las últimas consecuencias”. Palabras similares utilizó en el breve contacto que tuvo con los medios de prensa tras su jura como nueva ministra.
El sábado, en tanto, Barbás ingresó temprano al ministerio y se reunió con un cercano grupo de colaboradores, con el fin de delinear acciones para las primeras semanas, las cuales marcarán el rumbo de su gestión y su futuro como ministra de Salud.