Bautista Scotta, Lucas Aguilar, Pedro Galíndez, Alan Maldonado y Emiliano Daghero son cinco futbolistas juveniles que juegan en Talleres y que la empresa de representaciones de deportistas AmEro Sports & Management presentó en las redes como nuevos integrantes de su staff.
Los posteos de referencia muestran las imágenes de los jóvenes jugadores -de los más destacados y promisorios del semillero albiazul, según entendidos- luciendo la indumentaria oficial de la “T”. También incluyen al escudo azul y blanco registrado como marca por el club de barrio Jardín.
La firma AmEro Sports & Management tiene su sede en la ciudad de Querétaro y un artículo publicado en la revista Forbes en marzo pasado la describe como “la agencia de futbolistas mejicanos que crece en el mundo”. Alejandro García, abogado, y Santiago Arbide, licenciado en Ciencias Políticas y agente FIFA, son sus directores ejecutivos.
Entre los deportistas que representa la empresa figura Alfredo Talavera, el experimentado arquero del seleccionado de México que dirige Gerardo “Tata” Martino. Y también otro cuidapalos: Sebastián Fassi, flamante incorporación de Coyotes de Tlaxcala, equipo que milita en la tercera división del fútbol azteca y que pertenece al Grupo Pachuca.
Sebastián es el hijo futbolista del presidente de Talleres Andrés Fassi y también incursiona en el mundo de los deportes virtuales como vicepresidente del equipo MeT eSports.
Este emprendimiento tiene como máxima autoridad a su colega Talavera y como financistas a García y Arbide, los CEOS de AmEro Sports & Management.
PROMESAS. Las imágenes de los cinco juveniles de Talleres que difundió la empresa de representaciones deportivas mejicana AmEro Sports.
Gran Hermano
Arbide no es un desconocido en Talleres. En octubre de 2019 estuvo en el Estadio Kempes presenciando un partido entre el elenco albiazul y Lanús. “Increíble el gran trabajo de esta institución, los resultados no son una casualidad”, escribió en su cuenta de Instagram al pie de una foto que lo muestra abrazado con Juan Pablo Fassi, también hijo de Andrés y por entonces flamante director deportivo de la “T”.
En las redes sociales Arbide exhibe una gran afinidad con Sebastián, el primogénito del mandamás albiazul, a quien suele referirse como “mi hermano menor”.
AmEro Sports & Management tiene mucha presencia en Costa Rica, una oficina en Rusia y la mira puesta en España, un mercado donde los Fassi también buscan expandir sus dominios luego de desembarcar en el fútbol uruguayo con el gerenciamiento de Atenas de San Carlos.
Su filial en Sudamérica, que abrió en agosto del año pasado, funciona en Córdoba y tiene como máximo responsable a Ignacio Conte, un letrado con estudios en derecho deportivo.
Conocido como “el Mini Fassi” entre sus colegas con los que comparte actividades vinculadas al Colegio de Abogados y también grupos de WhatsApp, Conte es uno de los 100 asambleístas que representan a los socios en la conducción de Talleres.
Ignacio Conte. Asambleísta de Talleres, es la cara visible en Sudamérica de la empresa que recluta juveniles albiazules.
¿Fuera de reglamento?
Según su estatuto vigente, la entidad de barrio Jardín considera a la Asamblea de Representantes de Socios como su “órgano supremo”.
Respecto a la conducta de sus integrantes no hay referencias expresas en el Reglamento Interno de Talleres. El paper sí establece para los miembros de comisión directiva el llamado “deber de confidencialidad” respecto al manejo y uso de cualquier información estratégica -por caso, la proyección deportiva de un futbolista- a la que accedan por su función en el club.
La misma normativa señala como una “falta grave”, pasible de sanciones que pueden llegar hasta la expulsión, el incumplimiento de aquella exigencia “con el propósito de obtener un beneficio propio o ajeno”.
Ajeno a cualquier objeción estatutaria, reglamentaria o ética, Conte se muestra en redes sociales junto a varios de los juveniles albiazules que ahora representa. Con una ancha sonrisa y los contratos sobre la mesa.