En la tarde de este sábado, el intendente Martín Llaryora decidió anunciar cambios en el gabinete municipal. Una versión que había corrido en la semana y que, en la tarde de ayer, se confirmó.
El secretario de Gobierno, Miguel Siciliano, queda como secretario de Gobierno y de Gestión General del Gabinete. Dentro de cuya órbita se crea la Subsecretaría de Gestión de Gabinete a cargo de Guillermo Marianacci. El exfuncionario de Rubén Martí había sido parte de la gestión de Llaryora en el arranque, pero luego, tras una serie de desencuentros en la relación con los directores de los CPC, quedó apartado. Por lo que esto se toma como un regreso importante.
En tanto, también dentro de la órbita de Siciliano quedará la subsecretaría de Gobierno a cargo del propio Siciliano.
Asimismo, Gabriel Bermúdez, actual secretario de Desarrollo Metropolitano, tendrá en su órbita la subsecretaría de Conectividad Urbana y Seguridad Vial, con todo lo concerniente al tránsito y los inspectores.
Por último, también se dio a conocer la creación de una nueva secretaría. Se trata de la de Fiscalización y Control, a cargo de Fabiana Gigli. Misma funcionaria que tenía ese control, aunque con rango de subsecretaría.
Ahora, sube en la escala del gabinete y suma poder Siciliano, teniendo en cuenta que es una funcionaria de su riñón y que viene desde los tiempos del olguismo.
Los cambios son gestos fuertes hacia adelante y muy bien tomados en el entorno de Siciliano. Sobre todo, después de lo que había ocurrido con la polémica de Ulises Bueno.