Con el coronavirus como impedimento para bajar a las provincias, la territorialidad PRO se empezó a medir en los últimos días vía Zoom, la plataforma elegida para la comidilla y la agenda política en tiempos de pandemia. Así, y sin los fierros de Emilio Monzó ni la lapicera de Marcos Peña, arrancó en Córdoba la pelea que tiene dos ejes a nivel nacional y sus respectivas referencias en los distritos provinciales.
En un rincón, el expresidente Mauricio Macri junto a la actual titular del partido a nivel nacional, Patricia Bullrich; en el otro, los moderados: el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el extitular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó. Y en Córdoba, el bastión de 2015 y 2019, con las fichas que recién empiezan a acomodarse.
Durante la semana que pasó, todos tuvieron contactos con los cordobeses vía telefónica o a través de la mencionada aplicación. Macri arrancó un intento por reincorporarse a la política hace unos días y en la semana, Bullrich también habló. Los que conversaron con la exministra de Seguridad le consultaron por qué la ausencia del expresidente y la dirigente dijo que si aparecía en este momento “iban a salir a tirar con el pasado”.
Es halcón, no paloma. Bullrich tejió vínculos con distintos sectores del PRO en Córdoba en el último tiempo. Tiene relación con los parlamentarios, con la juventud y con el sector del partido que se quedó sin cargos, pero continúa militando.
De ese lote, una fuente cordobesa que tuvo contacto con la exministra dijo a PERFIL CORDOBA: “si esto fuera como en su momento en Boca, de halcones y palomas, ella está del lado de los halcones. Sabe todo, conoce todo lo que pasa acá, está al tanto de la interna y reporta directo a Macri”.
Hoy en Córdoba, dentro de los cercanos al tándem Macri-Bullrich están la senadora Laura Rodríguez Machado, y los diputados Héctor Baldassi y Soher El Sukaria. El exárbitro siempre tuvo una relación distante con el alcalde porteño y las mujeres hablan con Bullrich y Macri, además de condicionarlas un acercamiento a Larreta por la mala relación con el monzoísmo.
Este lote además tiene diálogo con la exgobernadora bonaerense María Eugenia Vidal. La exmandataria habló vía Zoom en la semana con los diputados, donde tiene un engranaje clave que es el jefe de bloque PRO, Cristian Ritondo; en la charla hubo ausencia de los “federales”, el grupo de diputados que responde a Monzó y Nicolás Massot.
“De ellos, entró un rato a la charla (Gabriel) Frizza y se fue”, dicen desde el grupo que habla con Bullrich.
Moderados. “De los dos lados, tanto en el oficialismo como en la oposición, hay sectores que consideran que la grieta sigue ‘garpando’; y otros más moderados. Entre los primeros están Bullrich, (Fernando) Iglesias, Cristina (Kirchner) y (Elisa) Carrió, por ejemplo; y en los otros hay que incluir a Horacio (Larreta), algunos gobernadores, Emilio o Frigerio”, señalan a este diario.
El eje del jefe de Gobierno porteño y el extitular de la Cámara de Diputados ve un panorama nacional con sectores de diálogo y pretenden incluir a ciertos gobernadores. Sobre todo, en aquellos distritos donde la marca Cambiemos no califica para ganar sin un acuerdo provincial.
El martes, en una charla vía Zoom que encabezó Monzó hubo 100 personas asistiendo al cruce con el bonaerense y casi 200 que se quedaron afuera porque no era el formato premium de la aplicación.
Allí, Monzó bancó la postura conciliadora de Larreta. “Es momento de diálogo y hay que preparar la contención para cuando se salga de la pandemia”, dijo entre otras cosas. En la misma plataforma, habrá esta semana una charla el miércoles de Frizza junto a Sebastián García de Luca, actual diputado y hombre de Frigerio; y otra el viernes con Massot y Darío Capitani. “No se abren como en una charla personal porque hay miedo a la grabación, pero van marcando una hoja de ruta”, cuentan los que asisten.
Los alfiles de Horacio. Rodríguez Larreta había empezado a reconfigurar el GPS para el interior hasta la pandemia. De todos modos, cuenta con dos alfiles que operan en las provincias y que tienen aceitados vínculos en el Congreso: Eduardo Macchiavelli y Álvaro González. El primero, autoridad nacional del partido que sigue lo que pasa con la interna amarilla acá; y el segundo, diputado de buena relación con Mario Negri.
Cerca del líder del interbloque sostienen que Alberto Fernández eligió a él y a Rodríguez Larreta como referentes de la oposición. “Con uno bloquea a Macri y con el otro a (Alfredo) Cornejo”, dijeron en la noche del viernes cuando el presidente hablaba con los líderes de bancadas opositoras en el Congreso.
En el entorno de Negri aseguran también que es parte del proyecto de transversalidad del alcalde porteño y que utiliza al diputado para semblantear además al PRO cordobés.
Los monzoístas que hablan con Larreta, sin embargo, lo ven distante de Negri. “Álvaro usó a Negri para conseguir los votos y ser autoridad de cámara; y Mario se los dio porque así bloqueaba a Cornejo”, tiran desde el ala moderada. Además, le siguen facturando lo costoso de las negociaciones en Diputados cuando eran oficialismo: “cada vez que cerraba Negri era complicado conseguir los votos”.
Además, este sector asegura que, cuando llegue el momento de negociar CABA entre Larreta y Martín Lousteau, uno de los complicados puede ser Negri, que no está entre los preferidos del senador radical a la hora de hablar del partido en Córdoba.
Lo que resta es la interna, la posible modificación de la Carta Orgánica nacional, la afiliación local que continúa aún en cuarentena y la pelea por el padrinazgo de los apoderados es lo que viene. En un fixture amarillo que trata de esquivar la pandemia.