El viernes último la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba habilitó la feria, confirmó la prisión preventiva y negó la excarcelación a Matías Halac Martínez, un hombre que es investigado por recibir envíos postales desde Europa con drogas sintéticas para proveer a fiestas electrónicas que se realizan en Córdoba.
Los jueces Eduardo Ávalos e Ignacio Vélez Funes fundamentaron la decisión en que Halac Martínez, si bien vivió prácticamente toda su vida en nuestro país, es nacido en Estados Unidos y cuenta con pasaporte de ese país.
Los delitos que se le endilgan, junto a su pareja Paola Casalis, son comercio de estupefacientes y contrabando calificado en grado de tentativa y tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Uno de los argumentos que motivaron el rechazo de su excarcelación es que, en caso de llegarse a una condena, esta será de cumplimiento efectivo, porque la pena prevista va de 4 a 16 años de prisión.
Desde el mes de marzo, la Justicia interceptó encomiendas en por lo menos cinco oportunidades dirigidas a nombre de la pareja, provenientes de Holanda, Portugal, Países Bajos y Alemania, con importantes cantidades de pastillas de éxtasis.
A ello se suma que en los viajes que realizó Halac Martínez a distintas ciudades del país, como Buenos Aires, Tucumán e Iguazú, mantuvo conversaciones telefónicas donde hacía referencia a estupefacientes y otras sustancias prohibidas en su poder para comercializarlos.
Red de narcotráfico. Los magistrados resaltaron que existe la fuerte sospecha de conexiones con otras personas dedicadas al narcotráfico, por lo cual, en caso de recuperar su libertad, podría entorpecer esas investigaciones. El 8 de diciembre último, el juez federal Ricardo Bustos Fierro había ordenado su procesamiento y prisión preventiva y en esa resolución citó como pruebas escuchas telefónicas que permitieron verificar que Halac Martí- nez y Casalis habrían estado organizando una fiesta electrónica llamada “Dark Electronik” con el objetivo de vender las drogas sintéticas, de lo que deducen que podría haber más envíos postales en tránsito.
A toda la pesquisa que se desarrolló en los tribunales federales cordobeses se suma un antecedente. El propio imputado registra causas penales en trámite por hechos muy similares que son investigados por el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 1 de la ciudad de Buenos Aires. Por último, los jueces valoraron que si bien registra ingresos en concepto de alquileres, no se pudo acreditar alguna actividad laboral o profesional que aleje el riesgo de fuga.
