Con motivaciones diferentes, aunque la demanda es la misma, el angelocismo (Línea Córdoba) y el núcleo autodenominado “Radicalismo auténtico”, encabezado por Myrian Prunotto, impugnaron la designación de candidatos “a dedo” por parte de la cúpula radical, aunque en el fondo de la cuestión su rechazo apunta a que Juez sea el candidato a gobernador de la UCR y de Juntos por el Cambio.
El angelocista Javier Fabre advirtió que “desde hace un año que pedimos reglas de juego” en el marco de un proceso interno para dirimir las candidaturas. Ante la falta de respuesta del partido, Línea Córdoba recurrió a la Justicia para que la UCR y JxC garanticen “una elección interna abierta para la postulación de cargos electivos”.
“No queremos que nos impongan los candidatos, sino que los legitimemos”, afirmó Fabre. Al apuntar duro contra los referentes radicales y cambiemitas que forman parte de la “casta política”, aunque no dio nombres, el dirigente angelocista reclamó el debate político interno en torno “a los proyectos que van a solucionarle la vida a los cordobeses”.
Fabre argumentó que su planteo no se basa en “aspiraciones esporádicas y oportunistas”. Así, se diferenció de la demanda que exteriorizó Prunotto en nombre de su alineamiento que juega abiertamente con el candidato del peronismo. En este punto, todos los boina blanca coinciden en su crítica. La intendenta que ya pegó el salto a filas de Hacemos por Córdoba “está mandada por (Martín) Llayrora para romper”, aseguró un radical que integra la cúpula partidaria.
“No aceptamos esta autoproclamación o de cerrar el partido. Nosotros queremos la participación de cada uno de los afiliados de la UCR para la toma de las decisiones. Vamos a hacer lo necesario judicialmente para poder participar de las internas de Juntos por el Cambio”, aseguró Prunotto.
Al salir al cruce, el presidente del congreso partidario, Facundo Cortés Olmedo, afirmó que “estas acciones son fogoneadas y orquestadas por el peronismo que pretenden lastimar y ponerle obstáculo a la consolidación del frente opositor”.
En sus argumentos, el radical mestrista señaló que no se puede llamar a internas de Juntos por el Cambio porque “la alianza como sujeto jurídico no existe aún” hasta tanto se suscriba y sea habilitada por la justicia provincial. En el radicalismo sostienen que cuando eso ocurra “no habrá margen de tiempo” para unas Paso.
A su vez, el titular del órgano máximo de la UCR aclaró que en el caso de una interna en el partido su resultado “es absolutamente inocuo y estéril para la alianza”. Con la declinación de De Loredo, Cortés Olmedo cargó contra el angelocista: “Nunca supimos que Fabre quería ser candidato a gobernador”.
Sin margen para la interna en JxC, la resolución pasa por “la proclamación de los candidatos a cargos electivos a través de los órganos máximos de cada partido” que integre la alianza opositora que “es igual o más democrática que la urna”, remarcó.
En igual sentido, se pronunció la apoderada de la UCR, Verónica Garade Panetta, quien advirtió que el congreso partidario autorizó la alianza que, junto al reglamento, se firmaría a mitad de semana, aunque todavía “falta cuestiones que pulir”, indicó.
“De no ser factible el sistema de selección que está planteando Fabre, hay otros métodos democráticos de proclamación o selección de candidatos, como es la aclamación en asamblea –en el caso de la UCR es el congreso– de cada una de las fuerzas que integran la alianza”, replicó la mestrista.