La temporada de verano en Villa Carlos Paz dejó un sabor amargo para el sector turístico, siendo catalogada como la peor en años, según los datos relvados por la Asociación Hotelera y Gastronómica de Villa Carlos Paz (ASHOGA) que indican una disminución de 15% en comparación con 2023 y aún por debajo de los registros del 2022, cuando la economía comenzaba a recuperarse del impacto de la pandemia.
Aunque se registró un impulso positivo hacia finales de enero y durante el período de Carnaval, este no fue suficiente para revertir la tendencia de una temporada atípica, como se había anticipado desde diciembre.
El departamento de Estadísticas y Censo de ASHOGA señala fluctuaciones pronunciadas en la contratación de servicios turísticos, con un pico de reservas durante el Carnaval, pero con una caída significativa en la demanda durante los días de semana y la semana posterior al fin de semana largo.
A pesar de que el 35% de los establecimientos lograron niveles de ocupación mayores, gracias a diversas estrategias comerciales y a la calidad de los servicios ofrecidos, la mayoría experimentó una disminución en la rentabilidad.
La gastronomía también fue afectada por esta tendencia, registrando entre un 15% y un 20% menos de actividad en comparación con la temporada anterior. La institución concluye que esta temporada “marcó uno de los registros más bajos de los últimos años y con fuerte caída de la rentabilidad”.
Carolina Sacilotto, presidenta de ASHOGA, reconoció el desafío que enfrenta el sector en un año difícil, marcado por la crisis económica del país. Sin embargo, señaló el potencial de Villa Carlos Paz “para seguir posicionándose como uno de los principales destinos turísticos de Argentina, instando a redoblar esfuerzos para atraer una demanda turística afectada por la situación económica nacional”.
