Este lunes 27 de abril fueron confirmados 111 nuevos casos de COVID-19 en la Argentina en el informe vespertino que difunde el Ministerio de Salud Pública de la Nación. Con estos registros, suman 4.003 positivos en el país. Del total de esos casos, 905 (22,6%) son importados, 1.725 (43,1%) son contactos estrechos de casos confirmados, 897 (22,4%) son casos de circulación comunitaria y el resto se encuentra en investigación epidemiológica.
Se registraron cinco nuevas muertes. Son dos mujeres, una de 81 años, residente en la provincia de Buenos Aires; y otra de 70 años, que vivía en la provincia de Córdoba; y tres hombres, dos de 81 y 68 años, ambos oriundos de Capital Federal; y otro de 90 años, de la provincia de Chaco. Al momento la cantidad de personas fallecidas se eleva a 197.
El nuevo informe diario del programa de comunicación conjunta establecido entre el prestigioso Instituto de Investigaciones Epidemiológicas (IIE) y Editorial Perfil estudia los casos producidos a nivel nacional y los de la provincia de Buenos Aires y de la Capital Federal, además del indicador indirecto de inmovilización de la población (brindado por la localización geográfica de los celulares, que es información anónima) y su posible efecto en la ocurrencia de contagios.
“Si bien a un nivel macro hay circunstancias que no representan los procesos que ocurren a nivel de barrio y/o localidad, es posible reconocer que la asociación de estos indicadores hace posible reconocer situaciones de riesgo poblacional”, se establece en el informe del IIE.
Coronavirus: "Los distritos que más respetan la cuarentena tienen menos contagios"
El documento menciona el anuncio del presidente Alberto Fernández de permitir una hora de esparcimiento diaria a la población: “La intención es mostrar a nivel macro que el incumplimiento del aislamiento que se ha solicitado tiene consecuencias a nivel social con el crecimiento de casos y su peor expresión la mortalidad de conciudadanos”.
Sus afirmaciones se sustentan en que cuando menos del 60% de la población está inmovilizada, es posible observar pocos días después el incremento de casos. “En áreas de transmisión activa es importantísimo el mantener el elevado acatamiento de aislamiento”, se indica.
“Si realizamos el mismo tipo de análisis a nivel de la Provincia de Buenos Aires, se observa que el planteamiento efectuado a nivel nacional se replica a nivel provincial”, amplía el informe.
Y finalmente, se concluye: “En el caso de CABA el modelo a nivel macro no es repetible ya que la unidad de observación se realiza por la movilización fuera de su hogar, y una vez movilizado no se puede hacer el seguimiento de dónde realiza su actividad, influenciado por el gran número de personas que se mueven hacia la Ciudad por razones laborales”.
El epidemiólogo Roberto Chuit, director ejecutivo del IIE, especificó que la gente que reside en Capital Federal tiene “un altísimo cumplimiento” del aislamiento pero como la Ciudad “tiene mucho movimiento poblacional que viene de afuera el indicador no sirve”.
“Buenos Aires y Capital Federal tiene transmisión activa de coronavirus, lo cual es acertado que en esta etapa se ordene disminuir este tipo de actividades como el esparcimiento diario para proteger a la población más vulnerable”, afirmó Chuit.
B.D.N./FF
