Distintos funcionarios de Gobierno anunciaron que no habrá desdoblamiento cambiario: el jefe de Gabiente, Santiago Cafiero, y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, por citar dos casos, descartaron de cuajo la posibilidad. Sin embargo, más allá de la cuestión formal, en los hechos hay distintas formas de considerar el precio de la divisa (Contado con Liquidación, blue, por ejemplo) y ahora se suma uno más: el dólar turista. Esto se debe a que el propio Cafiero anunció este domingo que las compras con tarjeta de productos o servicios que se realicen en dólares tendrán un recargo del 30%.
Ahora bien, ¿cuál será el valor de la divisa para compras con tarjeta en el exterior, una vez que se termine de implementar este impuesto? A valores de hoy, se colocaría en $81,99. Redondeando, $82. ¿Por qué este número? El viernes, según el informe del Banco Central de la República Argentina, la cotización minorista de la divisa finalizó en $63,07 en la punta vendedora, por lo que a cada dólar que se gaste mediante plástico en el extranjero habría que agregarle $18,92, equivalentes al impuesto del 30%.
Esto no significa que quien piense en irse a las playas de Brasil deba agregar, de manera lineal, un 30% al valor de sus vacaciones. Muchas de las personas que tienen la posibilidad de viajar afuera cuentan con ahorros en moneda extranjera, por lo que una parte del viaje podría ser cubierta con esos billetes que están en el colchón o en una cuenta bancaria. El impuesto se aplicará a los gastos con tarjeta.
Preparan "impuestos para todos" para mantener un déficit fiscal "manejable"
En donde el traslado sí será directo será en aquellas adquisiciones en las cuales el pago se hace en un 100% con plástico: quien compre un celular en Estados Unidos a través de Amazon, por ejemplo, va a tener que sumar la carga impositiva al valor de su teléfono.
La postura de Cafiero es que este impuesto no solo permite recaudar, sino que también beneficia al turismo nacional. Sin embargo, el presidente de la Cámara Argentina de Turismo, Aldo Elías, criticó la medida y la consideró "mala". En una entrevista concedida al canal TN afirmó que "fomenta a informalidad"
Opiniones. La medida tuvo una repecepción heterogéna entre los economistas que suelen vertir sus visiones a través de las redes sociales. El economista jefe de Ecolatina, Matías Rajnerman, destacó un aspecto positivo de la medida: "Más allá de si están bien o no los aumentos de impuestos, si pudieran ser mejores u otras discusiones, el Gobierno optó por aumentar la presión impositiva antes que anunciar subas del gasto. Una señal de consistencia fiscal, importante de cara a la renegociación de la deuda".
Por su parte, el consultor y académico Eduardo Levy Yeyati criticó el impuesto: "Sería útil (para la próxima) medir efectos distributivos del dólar tarjeta con más precisión. En parte, beneficia al turismo local (ahora más caro) a expensas del vacacionante local (no del top 1%). Conjetura: a menor recaudación por este impuesto, más regresivo su impacto".
Por su parte, el sociólogo e investigador del Conicet Daniel Schteingart estableció una diferencia con el "dólar turista" que rigió durante la última etapa del kirchnerismo: "Una diferencia que -entiendo- hay entre este dólar turista y el que hubo entre 2012-15: En 2012-15 era a cuenta de Ganancias, es decir, los trabajadores de mayores ingresos podían descontarlo un tiempo más adelante. Incluso en 2016 AFIP devolvió lo retenido al resto. Ahora, en lugar de una retención provisoria, sería un impuesto".
En tanto, el director de la consultora Ledesma, Gabriel Caamaño Gómez, optó por sentar su posición a partir del humor:
En 1,2,3 empezamos a testear sesgo anti exportador de las medidas anti importaciones en la industria del turismo (?).
— Gabriel Caamaño (@GabCaamano) December 15, 2019
En el contexto de un TCR y una CC privada que ajustó por las malas, entre razones no puedo dejar de ver temas conceptuales y/o previsión (apreciación real futura) pic.twitter.com/gi4x6MW9qn