Funcionarios del Ministerio de Economía argentino y del Fondo Monetario Internacional (FMI) continúan las conversaciones sobre la modificación de algunas metas del acuerdo para el refinanciamiento del préstamo de US$ 44.000 millones, debido al impacto de la sequía sobre las exportaciones.
El fin se semana pasado, la directora del organismo, Kristalina Georgieva le comunicó al ministro Sergio Massa que la cuarta revisión estaba aprobada y se esperaba la votación del Directorio para el lunes o martes.
Sin embargo, los números preliminares del primer bimestre del 2023 obligaron a revisar algunas metas del acuerdo.
Las exportaciones del campo podrían caer hasta US$ 8.500 millones por la sequía
La aprobación de la cuarta revisión y de las nuevas metas resulta central para las cuentas públicas de febrero ya que habilitan el giro de US$ 5.000 millones, de los cuales US$ 2.700 millones deberán ser girados nuevamente al organismo.
El documento es esperado con ansiedad por el mercado ante los trascendidos que indican que el FMI pretende que Argentina suspenda el plan de recompra de deuda en marcha, indicó la agencia NA.
Con esta versión corriendo entre operadores, los bonos soberanos acumularon bajas durante toda la semana y el Riesgo País volvió a superar los 2.000 puntos.
Qué pautas negocia el Gobierno con el FMI
Las dos pautas inamovibles son el 1,9% de déficit en el PBI y el 0,6% de emisión monetaria. El cambio se producirá en los mínimos para la acumulación de reservas, afirma NA.
La sequía, la inflación, el menor crecimiento económico y su impacto en la recaudación, son datos factores decisivos para calcular las nuevas pautas, a lo que se sumó la gripe aviar que le resta capacidad de exportación.
Según fuentes vinculadas con la negociación consultadas por NA, se están cruzando simulaciones con diferentes supuestos de caídas o estabilización de las exportaciones, de impacto directo en el ingreso de dólares.
LM