“El FMI no controla la política argentina”, dijo este lunes 3 de junio el secretario de Política Económica, Miguel Braun. Durante un reportaje radial, el segundo del Ministro de Economía Nicolás Dujovne sostuvo que el programa lo implementa el gobierno argentino y que el “Fondo Monetario contribuye con financiamiento para sostenerlo”.
En declaraciones a FM La Patriada, Braun afirmó que el acuerdo con el FMI “se basa en el programa macroeconómico del gobierno y está preestablecido desde el año pasado. Se están cumpliendo con todos los desembolsos pautados”.
El endeudamiento que contrajo el gobierno de Mauricio Macri es uno de los puntos más cuestionados por la oposición y que están en la discusión electoral. El peronismo y el kirchnerismo apuntan a la injerencia que el organismo de crédito tiene sobre las decisiones de la Casa Rosada.
Las remarcaciones en alimentos, un límite para que la inflación baje más
En otro tramo de la entrevista, el secretario vaticinó que “en los próximos meses habrá algo de recuperación (económica)”. “Los salarios reales están empezando a subir”, consideró. “Va a pasar algo similar con las jubilaciones, que se actualizan automáticamente con la inflación pasada”, manifestó.
Miguel Braun advirtió: “Lo que vemos es que, de vuelta, va a haber algo de recuperación en el poder de compra”. Es lo que anhela Macri para llegar a las elecciones de octubre con el ánimo de los votantes un poco mejor que ahora. La pérdida del poder adquisitivo fue significativa entre los electores de clase media y el gobierno apuesta a recuperar a ese sector con una inyección al consumo.
Lo peor no pasó: la economía cae por la inflación y el dólar
De acuerdo a la agencia NA, las últimas estadísticas oficiales revelan que el índice de salarios del total de empleados registrados mostró un crecimiento de 4,3% en marzo de 2019 respecto del mes anterior, pero los incrementos, hasta ahora, no alcanzan para recuperar contra la devaluación del año pasado.
Los mismos datos oficiales muestran que la pérdida del poder adquisitivo fue empujada muy fuertemente por la devaluación y no alcanzó a ser reparada por la paritaria, que en muchos casos no tuvo cláusula gatillo.