La restricción al acceso de dólares para la importación de insumos aprieta cada vez más a las industrias que sí o sí necesitan productos que no se elaboran en Argentina y no tienen sustitutos.
Este jueves, la Unión Industrial Argentina (UIA), le planteó al ministro de Economía, Sergio Massa, que se deben encontrar mecanismos para que las empresas puedan acceder a los dólares. El secretario José Ignacio de Mendiguren, adelantó que el Gobierno analiza un blanqueo para que se puedan utilizar dólares no declarados en la compra de insumos críticos.
Mientras tanto, en Rafaela, provincia de Santa Fe, el frigorífico Sodecar comenzó a bajar su ritmo de producción de salchichas y distintos tipos de fiambres y embutidos por no poder acceder a reponer stock de tripas (principalmente), así como colorantes y conservantes.
De Mendiguren: "Estamos desesperados por conseguir dólares"
Entre junio de 2021 y el mismo mes de 2022, la empresa que tiene 378 empleados invirtió 350 millones y este año tenía pensados otros 300 millones, pero han debido reducir ese plan por esta situación.
“Es lamentable, porque uno está apostando a aumentar la capacidad y crecer en ventas, pero esta situación genera el efecto contrario”, se lamenta Rubén Burkett, gerente general del frigorífico rafaelino.
El establecimiento tiene capacidad instalada para elaborar 1.600 toneladas de productos. “Antes de las restricciones, veníamos en torno de las 1.500 toneladas, prácticamente trabajando a full, en algunos sectores hasta los sábados y todo eso se redujo. No hay horas extras ni se trabaja los sábados y, de agravarse la situación en 30 a 45 días, habrá que parar algunos días de la semana”, explica Burkett.
Las restricciones a la importación no es el único factor negativo para la industria. Según el gerente general, “el consumo interno bajó mucho y el precio de la carne de cerdo aumentó más del 40% desde que se cerró la importación. Además se está hablando de nuevos aumentos que se trasladan al precio, así como la paritaria anual que se podría cerrar en 80%”.
Gestiones ante el Gobierno
Burkett aclara que todo el sector de chacinados está pasando por la misma situación crítica y, con respecto a las gestiones, comentó que esta semana hubo una reunión con el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo y en la próxima verán al secretario de Comercio Interior, Matías Tombolini.
“Al Banco Central no hay forma de llegar, por eso estamos hablando con intermediarios en los ministerios para que nos liberen los pagos”, afirmó Burkett, quien agregó que, de mantenerse esta situación un mes más, “la empresa no cerrará de forma total, pero sí bajará mucho sus líneas de producción”.
LM