Elatraso en la cosecha y la demora en la venta de los productores genera interrogantes sobre cuánto terminará aportando el complejo soja a una economía argentina necesitada de dólares para recomponer sus reservas.
Según datos de IERAL,a fines de marzo, apenas se había comercializado el 5% del volumen esperado, muy por debajo del rango histórico entre 10% y 20%. En la primera semana de abril, se observó un aumento en las ventas, con un incremento de 320 mil toneladas a 750 mil toneladas, superando el promedio de 650 mil toneladas.
Uno de los indicadores de esta actitud es el poder de compra de los granos. Estimaciones de IERAL indican que en el período abril - agosto, el poder de compra de bienes y servicios básicos la soja podría ubicarse entre un 30% por debajo de la campaña pasada (canasta IPC). “De confirmarse, los valores entrarían en el podio de los peores registros de las últimas 22 campañas, solo siendo superados por los precios observados en los ciclos 2014/15 y 2016/17", aseguraron.
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“Está claro que el hombre de campo está disconforme con el precio de la soja, las retenciones que le impone el gobierno, el impuesto país, el tipo de cambio, el precio de los insumos, y el de la maquinaria agrícola. En resumen, está con escasa rentabilidad y muy enojado”, afirmó el economista Salvador Di Stefano.
Atraso en la cosecha de soja en la zona núcleo
Al contrario de lo que ocurrió el año pasado con la sequía, la cosecha se ve complicada por las lluvias de los últimos días, que impiden la entrada de las cosechadoras a los campos para levantar los granos.
Según la Bolsa de Comercio de Rosario, en la zona núcleo se pudo recolectar el 60% del área de soja de primera, generando el escenario de cosecha es el más difícil de los últimos 8 años. “Los temores de nuevas lluvias obligan a entrar a los lotes pese a todo y la humedad del grano está lejos de ser óptimo. Además, las plantas están en condiciones muy vulnerables y las pérdidas por desgrane van en aumento”, expresaron.
El rendimiento promedio cayó 2 quintales en una semana, ubicándose en 42 qq/ha. “En la zona de Rosario falta por levantar más de la mitad de la soja de primera y hay cada vez más problemas por dehiscencia y hongos como Cercospora. Hay lotes que no se sabe si podrán ser levantados. Sin camino no se puede sacar la mercadería”, advierten los reportes de la Bolsa rosarina.
En Marcos Juárez, Córdoba, se reportan pérdidas de rinde en sojas que estaban listas para cosechar y no llegaron a entrar las cosechadoras.
Desde Baradero y San Pedro solo se cosechó un 5% de la soja y preocupa la pérdida de calidad: “No se levantó casi nada. Hay mucha retención de hojas, tallo verde y en los lotes sembrados más tempranos no se espera que buena calidad de grano”, comentan.
