ECONOMIA
Opinión

¿Reforma, adecuación o modernización? El mercado laboral requiere de una nueva mirada

Dejar atrás estructuras vetustas y comenzar a plantear nuevos escenarios para los trabajadores es una necesidad. Y más allá de los eufemismos, reformular el mercado laboral es parte de la modernización de los estados y las empresas.

Mercado laboral
Mercado laboral | Freepick

Según el informe del Mercado de trabajo basado en la Encuesta Permanente de Hogares publicado en marzo de este año, la desocupación en el país había pasado del 7 al 6,3%, estudio que toma como base las 31 principales ciudades del país, que totalizan alrededor de 30 millones de personas. De hecho, todos los indicadores de actividad laboral tuvieron una mejora, aunque siempre el “pero” sigue manifestándose: creció el trabajo, aunque la informalidad de la economía sigue manteniéndose entre el 35% y el 40%, porcentaje de trabajadores que están “en negro”.

Son trabajadores cuyos haberes no suelen ser constantes, carecen de cobertura social y no aportan al sistema previsional.

Paritarias y reforma laboral, las claves del sector PyME en este momento

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Estos datos, que son preocupantes para la sanidad de la economía de cualquier país, se mantienen relativamente constantes y no aparece en la agenda de los candidatos que, en general, hablan de la creación de nuevos empleos y del empleo privado, pero sigue aumentando el empleo público, que contribuye a complejizar la situación financiera y fiscal del Estado.

Y en este punto es necesario poner el foco en un aspecto del mundo laboral que, en general, cuesta ser mencionado: la reforma laboral, modernización de los contratos de trabajo o relación empleador-empleado. Desde el conservadurismo de algunas fuerzas políticas, que parecen no encontrarse cómodos con “reformar”, comienzan a plantearse nuevos escenarios a partir de la reducción de la carga horaria.

Quizá debamos empezar a hablar de modernización del Código de Trabajo o buscar alguna palabra que haga sentir más cómodo a los diferentes actores para poder ver de qué manera empezamos a trabajar en algo concreto.

Seguimos viendo un país con el 40% de empleabilidad informal y en el que, durante los últimos 10 años, el número de monotributistas ascendió un 75% y hasta el momento, pese a la oportunidad que les ofrece la campaña, el ítem “trabajo” sigue siendo el más complejo de desarrollar por los candidatos.

Propuestas disimiles sobre la reforma laboral

La candidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, planteó la idea del "empleo privado de calidad" como uno de los pilares de su posible gobierno. En su presentación del programa económico ante el Consejo Interamericano de Comercio y Empleo, el miércoles 20 en el Sheraton porteño junto a Carlos Melconián, posible ministro de Hacienda, Bullrich volvió a referirse al tema, asegurando que va a eliminar regulaciones y obstáculos que afectan a las empresas para la contratación de empleados, aunque no brindó una descripción detallada de cómo implementaría su proyecto.

De entre los candidatos, quien expresa mayor intención de reformar el mercado laboral es el libertario Javier Milei: propone un modelo similar al “Fondo de Cese Laboral" que rige en la industria de la construcción, modelo que ya estuvo evaluando junto al Secretario General de la UOCRA, Gerardo Martínez. En este modelo, el trabajador aporta parte de lo que sería una indemnización por despido, reduciría el número de demandas judiciales

En este esquema, los empleadores aportan un porcentaje del salario de los trabajadores a un fondo, que se abre al finalizar la relación laboral. Esta medida busca proporcionar una alternativa a las indemnizaciones por despido y, según Milei, reduciría la probabilidad de que los trabajadores presenten demandas judiciales contra sus empleadores. Además, de extender este modelo a otros sectores económicos, Milei, además, está a favor de la creación de una nueva ley de contrato de trabajo sin efecto retroactivo, para eliminar indemnizaciones sin causa, y de reducir el tamaño del Estado a través de herramientas como retiros voluntarios o jubilaciones anticipadas. Nada dice, sin embargo, de la principal estrategia planteada –de manera exitosa en otros países latinoamericanos- por estados y empresas privadas, que es la reducción de la jornada laboral a cambio de un mismo salario. Es decir, menos horas por igual remuneración.

Antes de retomar esa opción, repasemos la tercera propuesta. El candidato del Frente de Todos, Sergio Massa, es el del enfoque más conservador y no dio, al menos públicamente, respaldo explícito a una reforma laboral radical, aunque sí enfatiza la importancia de proteger el poder adquisitivo de los salarios y mantener el nivel de actividad económica.

Pablo Moyano, contra JxC: "Tendría que haber una reforma laboral para que los Diputados vayan a laburar

En su rol de ministro de Economía, Massa no parece estar a favor de cambios significativos en la legislación laboral, sino que su enfoque se centra en promover el empleo y la actividad económica, y por eso llama al menos la atención que uno de sus pares, la ministra de Trabajo Raquel “Kelly” Olmos haya mostrado intenciones de algún cambio y comenzó a hablar una “reducción en la carga horaria” de los trabajadores. Sin mucho más “letra” ni mayor explicación de alcances o implementación, citó este aspecto de una reforma que ya está siendo adoptado en muchos puntos del globo.

Menos horas, igual salario

La reducción de la jornada laboral está siendo implementada en distintos países y empresas de Latinoamérica, que están llevando a cabo pruebas con jornadas de 35 a 40 horas semanales. En Chile, por ejemplo, la diputada Camila Vallejos fue la primera, hace 15 años, en comenzar a hablar de cambios en las relaciones de trabajo, impulsando la reducción de la jornada laboral. Esta reducción se convirtió en Ley con la asunción del presidente Gabriel Boric. El proyecto de Ley establece la reducción de la carga horaria semanal de 45 a 40 horas, reduciendo la jornada una hora por año y fue aprobado por amplia mayoría.

Esto demuestra que es posible para los Estados otorgar a los trabajadores nuevas formas de relación con el empleador –hasta con el mismo Estado-, manteniendo su salario y propiciando mayor tiempo libre, que luego del descanso se traduce en productividad. Esto trae aparejado, además, más consumo y mejora general de la economía.

Jornada laboral de 4 días: ¿es posible en Argentina?

En el aspecto laboral, Chile tiene una política más ordenada que la Argentina, donde rige aún la jornada laboral de 48 horas semanales establecidas en la Ley de Trabajo de la década del ’30.

Ecuador con 45 horas, Chile hoy con 40 y Brasil con 42 son algunos de los modelos exitosos de semanas laborales reducidas. En la Argentina, donde hay un 40% de trabajo informal y el 50% de las personas tiene hasta tres trabajos para llegar a fin de mes, hablarles de la reducción de la jornada laboral hasta casi parecería una broma, pero en algún momento hay que asumir el desafío.

Empezar a discutir la reducción de la jornada laboral es un buen inicio. Pero tiene que ser una discusión seria, que aporte a la sanidad de la economía, al bienestar del trabajador y al crecimiento de la empresa. Tenemos que poder empezar a pensar en empleos más dignos a partir de una discusión seria entres los sindicatos y el Estado.

Y si nombramos el Estado, ¿entraría dentro de la reforma laboral este achicamiento que quieren hacer algunos candidatos?, ¿qué hacemos con toda esa gente? Si se las saca del Estado, ¿hay empresas, empleo privado suficiente para contenerlos?

Estos interrogantes que solo pueden responderse a través de una legislación moderna, una economía ordenada y un Estados responsable, hoy son compromisos asumidos de palabra y en época electoral, todo se promete, aunque luego lo posible. Por desinterés y falta de compromiso real, quede en el olvido.

Habrá que ver si algo de esto se ve plasmado a partir de 2024.

* CEO de Nawaian