Desde este año, todos los docentes universitarios que desarrollen actividades científicas, tanto en instituciones públicas como privadas, podrán incluirse en el nuevo Sistema de Categorización de Docentes Investigadores Universitarios (SiDIUN).
La iniciativa, que fue presentada por la Secretaría de Políticas Universitarias como una acción para “jerarquizar la investigación científica y el desarrollo en el ámbito del sistema universitario”, tiene varias novedades. Por un lado, se consolida un único sistema nacional que incluye a profesionales de universidades nacionales, provinciales y privadas. Por otro, se actualizan los criterios de evaluación ponderando aquellos esfuerzos en la generación y la transferencia de tecnologías.
A su vez, se realiza la digitalización total del proceso para una gestión ágil, online y centralizada, de modo que se espera una reducción del tiempo estipulado entre llamados a categorización que, a partir de ahora, se realizan de forma periódica con convocatorias bianuales para ingreso y promoción, y cada cuatro años para permanencia.
Las evaluaciones se realizan de manera centralizada a través de comisiones por áreas de conocimiento (Ciencias Naturales y Exactas, Ciencias Médicas y de la Salud, Ciencias Agrícolas y del Ambiente, Ciencias Sociales, Humanidades, Ingenierías y Tecnologías), conformadas por especialistas de reconocida trayectoria. Dichas comisiones trabajarán con criterios homogéneos, pero atendiendo a la especificidad de las disciplinas.
Según Juan Carlos del Bello, rector de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) y ex presidente de la Comisión de Ciencia, Tecnología y Arte del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), “el SiDIUN es el producto de un trabajo conjunto entre el actual Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, el CIN y el Consejo de Rectores de Universidades Privadas (CRUP), y el resultado del mismo expresa un esquema de consenso y pluralidad.”
En tanto, Danya Tavela, vicerrectora de la Universidad Nacional Noroeste de la provincia de Buenos Aires (UNNOBA) y ex secretaria de Políticas Universitarias, expresó: “El planteo es interesante ya que permite reconocer a la transferencia como parte de la producción de nuestros investigadores y eso favorece el vínculo entre el medio socio productivo y la investigación que se lleva a cabo en las universidades.”
En relación a la demanda histórica sobre la incorporación de las universidades privadas, Rodolfo De Vincenzi, rector de la Universidad Abierta Interamericana (UAI) y presidente del CRUP, opinó: “Hace muchos años que anhelábamos este paso que acaba de darse, ya que posibilita que nuestros investigadores puedan integrarse al sistema nacional de ciencia y técnica y sean reconocidos en igualdad de condiciones con aquellos que forman parte de las instituciones públicas. Las universidades privadas ahora podrán dar cuenta también de su aporte para la mejora de la ciencia, el desarrollo productivo y la innovación tecnológica del país”.
Para categorizarse, el nuevo sistema requiere que los profesionales estén ejerciendo como docentes universitarios, avancen en la formación académica con titulaciones de posgrado y demuestren actividades de investigación y desarrollo (I+D) con resultados. En función de dichas variables, se asignan categorías y se publica un padrón único que permite visibilizar a todos los docentes investigadores del sistema universitario.