La edición de L´Osservatore Romano de esta semana tuvo en su tapa el funeral de Benedicto XVI encabezado por su sucesor, el Papa Francisco. Además de los detalles de la misa, se recopilan testimonios sobre el fallecido Papa Emérito y parte de su "testamento espiritual" redactado en 2006.
“Benedicto, fiel amigo del Esposo, que tu gozo sea perfecto al oír definitivamente y para siempre su voz”, fueron las palabras finales que el Sumo Pontífice le dedicó a Joseph Ratzinger luego de que falleciera el 31 de diciembre a los 95 años.
"En una plaza de San Pedro envuelta en un manto de neblina, miles de fieles se congregaron, en la mañana del jueves 5 de enero, para participar en la misa exequial del Papa emérito Benedicto XVI y darle su último saludo. Son personas de todas las edades y nacionalidades, jóvenes, laicos, sacerdotes y también familias, monjas, grupos de Italia y Alemania, con banderas y pancartas", describieron en la edición del medio.
El Papa también destacó la “sabiduría, delicadeza y entrega” de Benedicto XVI durante su gestión. “También nosotros, aferrados a las últimas palabras del Señor y al testimonio que marcó su vida, queremos, como comunidad eclesial, seguir sus huellas y confiar a nuestro hermano en las manos del Padre: que estas manos de misericordia encuentren su lámpara encendida con el aceite del Evangelio, que él esparció y testimonió durante su vida”, agregó.
En la capilla ardiente, cerca de 200.000 personas despidieron los restos de Ratzinger mientras era introducido en un féretro de madera de ciprés, en medio de la tradicional ceremonia.
El legado de Ratzinger
La página inicial incluye un documento escrito por el propio Benedicto XVI el 29 de agosto del 2016 donde, de manera breve, pide que sus seguidores no pierdan la fe.
“Si en esta hora tardía de mi vida miro hacia atrás, hacia las décadas que he vivido, veo en primer lugar cuántas razones tengo para dar gracias. Ante todo, doy gracias a Dios mismo, dador de todo bien, que me ha dado la vida y me ha guiado en diversos momentos de confusión; siempre me ha levantado cuando empezaba a resbalar y siempre me ha devuelto la luz de su semblante. En retrospectiva, veo y comprendo que incluso los tramos oscuros y agotadores de este camino fueron para mi salvación y que fue en ellos donde. Él me guio bien”, expresaba entonces el Papa Emérito en su testamento espiritual.
En otro pasaje de la transcripción que L´Osservatore Romano compartió completo, se expresaba Benedicto: "Jesucristo es verdaderamente el camino, la verdad y la vida, y la Iglesia, con todas sus insuficiencias, es verdaderamente su cuerpo. Por último, pido humildemente: recen por mí, para que el Señor, a pesar de todos mis pecados y defectos, me reciba en la morada eterna. A todos los que me han sido confiados, van mis oraciones de todo corazón, día a día”.
La palabra de otros vaticanistas sobre Benedicto
En diversos editoriales, distintas personalidades ligadas a Ratzinger describieron su trabajo y su obra. Entre ellos, los escritos de Andrea Monda, director de L´Osservatore Romano.
“Una de las reglas fundamentales para el discernimiento de los espíritus podría ser, por tanto, la siguiente: donde falta la alegría, donde muere el humor, ni siquiera existe el Espíritu Santo, el Espíritu de Jesucristo”, sostuvo Monda.
El ex portavoz del Papa también escribió una columna titulada “Una vida gastada en encontrar el rostro de Jesús”, en un desarrollo de 12 páginas que relata en primera persona las directrices centrales de la obra del pontífice.
Finalmente, en el interior de la edición se encuentra una breve biografía difundida por el Dicasterio de la Comunicación.