Bruno Bimbi: "El debate presidencial en Brasil fue un circo de horrores"
El disputa dialéctica entre Jair Bolsonaro y Lula da Silva del último domingo fue analizada por el periodista argentino. Analizó al bolsonarismo, como fenómeno político, y opinó que la mentira, en la construcción del fascismo, "es algo mucho más profunda como estructurante del discurso".
Bruno Bimbi |
Télam
"El asesinato de Marielle fue, de cierta forma, el inicio del ascenso de Bolsonaro al poder", expresó Bruno Bimbi, periodista que vivió en Brasil al comienzo del gobierno de Bolsonaro. Además, opinó que el actual mandatario "ha construido todo su gobierno en base a la mentira, el odio y a la violencia", afirmó durante una entrevista en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9)
Contanos tu experiencia con el Brasil que dejaste, gobernado por Bolsonaro, que viste a la distancia desde España durante estos años.
Viví en Brasil durante más de diez años y allí hice mis estudios de posgrado, trabajé como corresponsal para la señal Todo Noticias (TN) y como asesor de un diputado de izquierda, activista del movimiento LGBT, Jean Wyllys.
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Los últimos años fueron realmente muy difíciles, sobre todo después del golpe parlamentario contra Dilma Rousseff en 2016. El crecimiento de estos grupos de extrema derecha vinculados a milicias, a bandas de asesinos a sueldo, a pastores evangélicos fundamentalistas, una coalición de grupos muy peligrosos que terminaron confluyendo en la candidatura de Bolsonaro. Estos grupos terminaron creando un clima “invivible” en Brasil.
Los últimos meses que pasé en Brasil, junto con Jean, la pasamos circulando en un auto blindado con custodia armada, porque él recibía constantemente amenazas de muerte, contra él y su familia. Esto luego de que asesinaran, con cuatro tiros en la cabeza, a nuestra compañera Marielle Franco, concejal en Río de Janeiro, una dirigente política muy joven, nacida en la favela, socióloga, lesbiana y negra. Representaba todo lo que esta gente odia.
Bolsonaro y Lula, en el primer debate de cara al balotaje.Caption
El asesinato de Marielle fue, de cierta forma, el inicio del ascenso de Bolsonaro al poder. Las cosas se pusieron cada vez más pesadas. La última campaña en Brasil, recuerdo que tuvimos que retirarlo a Jean en momentos en que aparecían personas con remeras de Bolsonaro un revólver en la cintura, situaciones de mucha violencia. Ellos tienen una instalación de la mentira como eje estructurador de la política, algo muy característico del fascismo.
Ambos decidimos irnos. De hecho Jean había sido reelecto diputado por cuatro años más, y decidió renunciar a la banca e irse del país por las amenazas contra él y su familia.
¿Viste el debate presidencial ayer? ¿Nos darías tu impresión?
El debate presidencial de ayer en Brasil fue un circo de horrores. Yo vi todos los debates de las campañas presidenciales desde 2006 hasta el día de hoy. Lula con Geraldo Alckmin, que lo enfrentó en 2006 y ahora es su candidato a vice. Los debates de Dilma con Aecio Neves. Además vi debates de candidaturas a gobernador, alcaldías, etc. de los últimos 13 años. Conozco bastante bien el sistema de debates en Brasil, y nunca había visto algo como lo que vi ayer.
Porque todos los debates anteriores, aún con diferencias ideológicas y políticas muy grandes, eran debates entre políticos profesionales, entre personas educadas y civilizadas. Lo de ayer fue algo completamente distinto. Bolsonaro se pasó el debate diciendo una mentira cada diez segundos.
En Breve historia de la mentira fascista, el último libro de Federico Finchelstein, un profesor argentino que trabaja en una universidad den New York, estudioso del fascismo. En el libro dice que la mentira forma siempre parte de la política, la mayoría de los políticos dicen alguna vez alguna mentira. Pero en el fascismo, la mentira está a otro nivel. No es el tipo de mentira en la que uno piensa, es algo mucho más profunda como estructurante del discurso.
Bolsonaro ha construido todo su gobierno en base a la mentira, al odio y a la violencia. Durante la pandemia, él decía que el covid no existía, que era una mentira, un invento de la prensa, de los comunistas, del diario O Globo. Después, dijo que era una gripecita que no hacía nada. Después inventó un remedio milagroso, que todos los científicos rechazaban, y mandó al ejército a comprar toneladas de ese medicamento, que lo fabricaba uno de sus donantes de campaña, y los distribuía sin receta médica.
Hizo campaña contra la cuarentena, contra el uso de mascarillas, contra todas las recetas sanitarias. Y llegó al extremo de decir en determinado momento, y ayer lo repitió en el debate, que los médicos mandaban a enterrar a personas que se habían muerto por otra cosa, diciendo que se habían muerto de Covid-19, porque así recibían más fondos. Todo el gobierno de Bolsonaro fue una colección de mentiras, y el debate de ayer lo fue también.
