Sergio Massa busca un enfoque más concreto en su estrategia y recorre las provincias apuntando a un contacto más cercano con la gente.
Cómo piensa Massa el debate presidencial |
Télam
El "Plan Platita" ha llegado a su fin, y ahora se avecina la última fase de la campaña electoral, al menos para la primera vuelta que tendrá lugar el 22 de octubre, y los debates presidenciales serán momentos cruciales en esta carrera hacia esa fecha, comentó Alejandro Gomel en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).
Sergio Massa, el candidato-ministro, continúa con su estrategia de recorrer las provincias y ciudades, priorizando el contacto directo con la gente y tratando de cambiar su discurso confrontativo con Javier Milei hacia temas cotidianos y concretos. El objetivo es alejarse de los grandes titulares y definiciones abstractas.
El primer debate presidencial está programado para el domingo a las 9 de la noche en Santiago del Estero. Se espera que el ministro de Economía recupere su voz, que ha sido afectada por su frecuente participación en actos y anuncios. La confianza en su experiencia y habilidad política es alta, y se espera que pueda liderar el debate con éxito.
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Los estrategas del candidato del oficialismo también confían en que el debate se centre en temas diferentes al de la inflación, que es considerado un punto débil para el Gobierno. El debate de los vicepresidentes ya mostró que es posible cambiar el enfoque de las discusiones, y esperan que esto se repita en este cónclave.
Sin embargo, reconocen que los debates suelen reafirmar las opiniones de los votantes en lugar de persuadir a nuevos electores. La excepción podría ser un giro emocional inesperado por parte de Javier Milei, quien ha mostrado tendencias emocionales cambiantes en el pasado.
Por eso, desde Unión por la Patria, la apuesta es que se desestabilice emocionalmente durante el debate y esto pueda afectar el curso de la discusión.
En cuanto a las encuestas que manejan desde el Gobierno, las cifras actuales sugieren que Patricia Bullrich está corriendo desde atrás. Se estima que sería un 35% para Milei, 30% Massa y 25% la candidata del PRO.
Sin embargo, estos números son tomados con precaución, ya que en los días previos al 13 de agosto, no tenían ninguna encuesta que reflejara el fuerte crecimiento del libertario.
