Si como se suele decir la interna de Juntos por el Cambio está signada por una pelea entre halcones y palomas, los planes para salir del cepo cambiario están en el centro de esa disputa entre sus dos precandidatos presidenciales. A medida de que se acercan las PASO del próximo 13 de agosto, las diferencias se hacen más evidentes.
Ayer, el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta volvió a agitar el escenario. Exageró la cuestión al extremo al decir que si se quita el cepo el 11 de diciembre "el dólar se iría a 6.000 pesos". Agregó que el que diga que va salir de los controles el primer día del gobierno "está mintiendo, es un divague".
Telechea: “Terminar con el cepo el 10 diciembre podría generar una inflación del 200%”
Su referente en economía, Hernán Lacunza, explica esa postura cada vez que puede: unificar el tipo es un objetivo central, pero antes se requieren otras cosas.
Quien sostiene el "divague" al que se refirió Larreta es su adversaria interna, Patricia Bullrich, que apuesta a todo lo contrario y quiere levantar las restricciones cambiarias el día 1 de su gobierno, subida al tren de jugar fuerte para mostrarse lejos de cualquier moderación, sobre todo si esto puede confundirse con tibieza.
Laspina volvió a arremeter contra el cepo cambiario
El potencial ministro de Economía de Bullrich, Luciano Laspina, asegura que "el cepo es la base del kirchnerismo" y que con él se asienta "la represión financiera y el populismo" que lastima la economía argentina.
Sin grandes diferencias en otros tópicos de la discusión económica, ya que coinciden en la necesidad de "abrir" la economía argentina, iniciar un camino de desregulación y eliminar subsidios, el timing y la forma para salir del cepo cambiario se llevará la mayor parte del debate dentro de la principal fuerza opositora.
AO JL