La primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, le puso fecha al referéndum sobre la independencia: el 19 de octubre de 2023. La decisión de Sturgeon coincide con un momento de gran debilidad del gobierno del primer ministro Boris Johnson.
La independencia de Escocia fue rechazada en el referéndum de 2014. Ese acto tuvo la autorización del primer ministro David Cameron, padre del Brexit. Eso difícilmente ocurra ahora. Johnson teme que un triunfo de los nacionalistas escoceses se convierta en el primer capítulo del desmembramiento del Reino Unido.
Escocia quiere un segundo referéndum de independencia
Después de Escocia sería Irlanda del Norte, que podría unirse a Irlanda para transformarse en un país europeo y terminar con el statu quo colonial británico. Prima una duda: el poder del Parlamento escocés para aprobar la legislación necesaria para celebrar la votación sin el permiso del gobierno británico.
La legalidad del referéndum obliga a Sturgeon a dirigirse a la Corte Suprema para conocer su parecer. En caso de que el máximo tribunal no diese su visto bueno, Sturgeon ha dicho que las próximas elecciones generales en el Reino Unido se convertirán en una suerte de "referéndum de facto".
JL PAR