En 2023 se cumplen 75 años desde que, el 14 de mayo de 1948, el Estado de Israel fuera proclamado en el territorio otorgado por el plan de la ONU en Palestina.
Este mes de enero ha sido el más mortífero para los palestinos de Cisjordania desde 2015. En lo que va del año, 35 palestinos han muerto por el fuego israelí, lo que equivale a un promedio de más de una víctima mortal por día.
En Jerusalén hubo tres atentados con arma de fuego en 24 horas. El saldo: siete israelíes muertos y cinco heridos.
La escalada de violencia comenzó el jueves con una incursión militar israelí en la ciudad de Yenín, Cisjordania, que se saldó con la muerte de 10 palestinos.
Crecen los enfrentamientos entre israelíes y palestinos
Al día siguiente, un palestino abrió fuego cerca de una sinagoga ubicada en Neve Ya'akov, asentamiento de colonos judíos en Jerusalén Este ocupado. Mató a siete personas e hirió a otras tres más. Fue el atentado más mortífero en la ciudad desde 2008.
El gobierno de Israel, el más radical en la historia, evalúa dar permisos de armas a los civiles en los asentamientos en zonas que eran palestinas.
A la mañana siguiente, otro atentado en el asentamiento de colonos judíos Ciudad de David, ubicado dentro del barrio palestino de Silwan, también en Jerusalén Este, dejó dos heridos.
Ese mismo sábado un hombre armado abrió fuego en un restaurante ubicado en otro asentamiento judío de Cisjordania. No hubo víctimas.
La respuesta del gobierno de Benjamin Netanyahu ha sido ordenar la demolición de la casa del atacante palestino del viernes, que murió poco después por disparos de la policía. Esto marca un cambio en la política de Israel. Sus fuerzas suelen demoler como represalia las casas de palestinos que mataron a israelíes.
Siete muertos frente a una sinagoga en Jerusalén por un ataque terrorista a tiros
Entre otras medidas, el gobierno israelí prevé revocar la residencia de palestinos en Jerusalén y enviarlos a zonas de Cisjordania bajo el autogobierno de la Autoridad Nacional Palestina, así como dejarlos sin empleo sin necesidad de una vista judicial.
Los mismos israelíes no comulgan con la política de mano dura. Miles se congregaron el sábado en Tel Aviv en contra de Netanyahu y de su coalición de ultraderecha con pancartas que decían que representan un peligro para la paz mundial.
Solo la Unión Europea ha lanzado un llamado para frenar la espiral de violencia mientras el secretario de Estado norteamericanos, Antony Blinken, exhortó a las partes a recobrar la calma después de reunirse con Netanyahu en Jerusalén.
AO FM
