Las polémicas declaraciones y las extremas promesas de campaña de Javier Milei están reflejadas en ideas derechistas que proponen los principales líderes mundiales y que, en algunos casos, sólo fueron amenazas que no se concretaron.
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Agencia NA
"Una de las hipótesis a analizar de la fenomenal elección que hizo Javier Milei este domingo es si se trata de una simple cuestión de estética, formas, hartazgo y gritos, o si además hay un proceso de derechización de la Argentina", resaltó Jorge Fontevecchia en la apertura de Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (101.9) del miércoles 16 de agosto del 2023.
Un libro recientemente publicado por una fundación alemana que promueve la libertad del mercado estudió 20 países en todo el mundo y los dividió en tres categorías: los países en los cuales hay un respaldo a la libertad económica, los países con actitud neutra y los países dónde hay un rechazo al libre mercado.
Entre este último grupo se encuentran España, Chile, Italia, Reino Unido, Alemania, Austria, Francia, Grecia, Rusia, y Bosnia. Los países neutros son Brasil y Suecia, mientras que los países que respaldan la libertad económica son Estados Unidos, Polonia, Corea del Sur, Japón, República Checa y Argentina.
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Las declaraciones viralizadas de Javier Milei entre las cuales se encuentra su anuncio de privatización del Conicet y el cuestionamiento de las investigaciones realizadas, y su idea de llevar a un plebiscito la ley del aborto porque "el proceso estuvo bastante viciado", tienen su reflejo en polémicos anuncios de otros líderes de derecha alrededor del mundo.
Uno de los íconos del proceso de derechización global es Donald Trump. El ex presidente estadounidense había prometido en medio de su campaña que, en caso de asumir, eliminaría el derecho de ciudadanía por nacimiento de los hijos de inmigrantes que se encuentren en el país de forma ilegal.
El mayor exponente de la derecha sudamericana en los últimos años fue Jair Bolsonaro, quien en su lista de polémicas declaraciones incluyó el rechazo a los afrodescendientes porque "no sirven ni para procrear".
También es cierto que muchos de los grandes anuncios y narrativas que construyen estos personajes luego no se terminaron de realizar. No se construyó el muro divisorio entre Estados Unidos y México que prometió Trump. Bolsonaro tampoco fusiló a toda la “petralhada”, es decir a los militantes del PT, algo demencial e inconcebible.
En el listado de las resonantes declaraciones derechistas alrededor del mundo también se encuentran las de Viktor Orbán. El primer ministro de Hungría defendió una "raza húngara no mezclada", aseguró que los habitantes de su país no quieren ser mestizos ni multiétnicos y criticó las políticas de migración propuestas por la izquierda.
En España, Iván Espinoza, diputado de Vox, aseguró que es natural discriminar a los inmigrantes por su lugar de origen e incluso se animó a teorizar sobre la "cualificación" de las personas que quieran vivir en el país europeo.
Las polémicas declaraciones de los líderes de derecha también apuntan contra las reivindicaciones feministas. Santiago Abascal, presidente de Vox, afirmó que que si un hombre mata a una mujer, no se trata de violencia de género, sino de un simple asesinato".
El último de los ejemplos que se pueden mencionar dentro de una lista mucho más larga de ideas derechistas es el de la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, quien llamó a sostener y tutelar la natalidad: "Se necesita un plan masivo económico y cultural para volver a poner a la familia al centro de la sociedad".
Más allá de las características particulares respecto a las formas que tienen los líderes de cada país, el proceso de derechización mundial pareciera estar llegando a la Argentina de la mano de Javier Milei.
